- POR MARTÍN VILLAGRA
- Periodista
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Tras el reconocimiento a Antonio “El Demonio” Bareiro, quien llegó a los 300 partidos, Libertad saltó a la cancha con la necesidad de triunfar frente a Guaraní. El reto era recuperar la punta del torneo Apertura, lo que al final consiguió con suficiencia y oportunismo.
El Albinegro tuvo el respaldo importante de su afición, que acudió en masa y a su estadio. El inicio fue peleado, entretenido, pero con pocas aproximaciones. Libertad tomó la iniciativa, pero le faltó precisión. Guaraní trató de mantener orden y aplicar contragolpes, pero quedó en evidencia al no tener peso ofensivo.
En el complemento, la temática no cambió. En ese ir y venir parecía que el marcador no se iba a romper. Predominaba la pelea en el medio y el partido que se fue enredando.
En una pelota parada llegó el desequilibrio. Centro desde el córner del juvenil Julio Enciso y cabezazo de Óscar “Tacuara” Cardozo. Molestado por varios hombres, no pudo salir el golero de Guaraní Devis Vásquez, quien quedó parado sobre la línea, no tuvo nada que hacer ante el tremendo testazo del goleador histórico de Libertad.
A partir de ahí se generaron más espacios y Julio Enciso comenzó a desequilibrar con sus corridas. Firme la defensa albinegra con Riveros, Viera y Piris, desde el medio se soltó varias veces Hernesto Caballero, otro que batalló mucho en el ganador. Hubo poca generación en Guaraní, donde el goleador Fernando Fernández no recibió asistencias para tener chances. La salida de Josué Colmán restó fuerza a la ofensiva aurinegra.
Cuando se iba el partido, Hernesto Caballero ganó por guapo una pelota y cedió pase para Julio Enciso, quien definió con remate seco. Era el segundo para que el estadio gumarelo sea una fiesta.
El punto negativo fue el ingreso de un hincha de Guaraní, quien reclamó actitud a sus jugadores tras burlar todo el sistema de seguridad.
REACCIÓN
“Partido muy inteligente”
“Creo que el equipo hizo un partido muy inteligente y lo ganamos sin ningún tipo de dudas”, dijo el DT de Libertad, Daniel Garnero, en conferencia de prensa. De todas formas, fue autocrítico y reconoció que nada se presentó fácil desde el inicio frente a Guaraní.
“Sabíamos que iba ser un partido difícil, enfrentábamos a un rival complicado, que tiene muy buenos futbolistas y una idea clara de juego. Que el pequeño detalle iba marcar una diferencia y nos costó en el primer tiempo. No pudimos tener claridad en esas salidas que buscamos. En el segundo tiempo tuvimos más de esa claridad. Haber hecho un gol abrió el juego y pudimos manejar mejor los momentos”, agregó.
Señaló que “estamos muy contentos y conformes, recibiendo pocos goles. Y los jugadores tienen mucho que ver en eso. Obviamente fue un partido difícil, no pudimos hacerlo como nosotros queríamos, de poder abrir el juego rápido. Los rivales juegan, buscamos de distintas maneras, saltando líneas, hicimos un gol de pelota parada que nos abrió el juego.”.