- POR MARTÍN VILLAGRA
- Periodista
- martin.villagra@gruponacion.com.py
Era clave ganar y los puntos valiosos para mantener la misma distancia en relación al puntero Guaraní. Cerro Porteño no falló en su visita a Villarrica frente Guaireña. El Ciclón logró el objetivo con sufrimiento y trabajo. Se impuso mediante dos goles de cabeza en el segundo tiempo. El local buscó por todos los medios, estuvo peleado con los goles, porque oportunidades tuvo. Júnior Marabel desperdició un penal sobre la hora. Fue extraordinaria la tarea del golero azulgrana Jean Fernandes. El brasileño fue fundamental, al tapar dos goles cantados al delantero José Verdún, estando el partido sin goles, incluso luego de abrirse el marcador, el portero evitó que el mismo Verdún llegue al empate y después al descuento. Jean hasta dejó su arco para rematar un tiro libre en gran forma, que si no fuese por la estirada del colega Ignacio Don, pudo terminar en un golazo.
Un necesitado Cerro Porteño salió a proponer. Firme en sus líneas y con mucho orden, Guaireña aprovechaba espacios y las imprecisiones defensivas para ser picante. Fue golpe a golpe a ritmo vertiginoso, interrumpido con el choque entre Parra y Paniagua, ambos de Guaireña. Paniagua se llevó la peor parte, fue cambiado y derivado a un centro asistencial para mejor atención. Cerro había sufrido, tuvo algunos chispazos y aproximaciones con Claudio Aquino y Mauro Boselli.
En el complemento, Robert Morales, recién ingresado, precisó unos 40 segundos para abrir el marcador con un cabezazo. Pase de Claudio Aquino para Daniel Rivas, quien lanzó centro perfecto para la definición. Guaireña se lanzó tras el empate. Había otro cabezazo letal en el camino. Córner de Claudio Aquino y ganó en el primer palo Alan Benítez. El segundo para Cerro fue decisivo y sirvió para manejar el trámite. Un balón pegó en la mano de Alberto Espínola y llegó el penal para Guaireña. Júnior Marabel, quien había iniciado la jugada, pidió rematar y lo hizo potente por uno de los palos. Otra acción clara que no fue aprovechada, entonces no hubo más tiempo.
