Dos selecciones necesitadas, Paraguay y Bolivia, se enfrentan en la altura de La Paz en un partido sin concesiones por las eliminatorias sudamericanas en busca de mantener el sueño de llegar al Mundial de Qatar 2022.
Para ganar hay que mejorar en todo sentido con relación al partido que disputó la selección de Berizzo en Santiago frente a los chilenos. Se debe mostrar más actitud a la hora de encarar este compromiso y el técnico es el gran responsable en la elección de los jugadores y la correcta aplicación de su sistema.
Bolivia llega con un buen ánimo después de ganar de local a Perú, pero está más abajo en la tabla que Paraguay. Tiene oxígeno y por eso está, al igual que el rival de hoy, más que obligado a vencer si pretende escalar posiciones.
Paraguay tiene la misma misión. Ganar o ganar. Una nueva derrota acarreará una serie de inconvenientes al propio Berizzo, a los futbolistas y a los mismos dirigentes.
El técnico argentino debe hacer variantes con relación al equipo que jugó frente a los chilenos, porque le falta la personalidad que en años anteriores le permitió irse a cuatro mundiales seguidos.
Berizzo cuenta con todos para el partido de hoy. Solo Marcos Cáceres no viaja y ya está afuera de la convocatoria e incluso de la concentración de Ypané. Júnior Alonso y Mathías Villasanti están habilitados y vuelven al once inicial. Además, habrá novedades en el medio como en el ataque. La única victoria en La Paz fue un 2-1 en 1973 p a r a Alemania 74. Luego s e registraron tres empates y cinco victorias bolivianas. Si gana Paraguay será histórico.
En caso contrario, habrá más lamentos en todos los niveles. En el estadio estarán 15 mil aficionados bolivianos que respaldarán a su equipo, pero desde lejos una gran mayoría de amantes del fútbol y de la Albirroja estarán pendientes de lo que pase en La Paz.