- POR IRENEO ACOSTA R.
Es indiscutible que los errores se pagan caro en todo orden. Olimpia no jugó bien su partido anoche frente al Flamengo y fue goleado 4 a 1 en pleno Para Uno. Más allá de los errores del equipo de Sergio Orteman, también llegaron los fallos arbitrales que perjudicaron al Franjeado.
Giorgian De Arrascaeta puso el 1-0 tras habilitación de “Gabigol”. Después la agresión con el puño del goleador ante Salazar que lo noqueó y lo mandó al sanatorio, inconsciente. El árbitro sancionó falta del lateral y siga el juego. Pero cuando Filipe Luis fue expulsado por doble amonestación, el árbitro Vigliano del VAR llama a Rapallini y revisan un leve pisotón de Richard Ortiz, elimina la expulsión y marcan penal. “Gabigol” aumenta. En tiempo agregado, Iván Torres descuenta y van al descanso con la mínima diferencia.
Olimpia no reaccionó, jugó un mal partido y no pudo reacomodarse. Roque corrió más que todos, Derlis intentó, pero cuando estuvo mejor lo reemplazan. Los que entraron tampoco fueron solución. Flamengo cuando quiso, atacó y puso en peligro la valla de Aguilar, quien evitó que la goleada fuera mayor. Para cuando eso, “Gabigol” y Vitinho ya cerraban la cuenta para romper la hegemonía franjeada.
En la revancha los olimpistas deben mejorar bastante para evitar otro papelón y lo que es más, el arbitraje debe dejar de perjudicar a los equipos no brasileños. Lo de anoche suma y sigue, más contra los conjuntos paraguayos.
GRAN SUSTO
El argentino Víctor Salazar de Olimpia asustó grande anoche a todos los presentes en el estadio Manuel Ferreira, especialmente a sus compañeros.
En una acción desafortunada, el uruguayo Daniel de Arrascaeta del Flamengo al girar conectó un puñetazo en pleno rostro de Salazar, quien se cayó desvanecido y tuvo convulsiones por el fuerte golpe.
Fue asistido de emergencia en la misma cancha y derivado posteriormente a un centro asistencial para recibir todos los cuidados correspondientes.
Su diagnóstico indicó politraumatismo de cráneo. Se quedó en terapia anoche. Será revisado por un neurólogo y un oculista.