Alexander Mejía (32 años) es agradecido con Dios y su familia, para él piezas fundamentales en la consagración de Libertad como campeón del torneo Apertura. No tuvo muchas chances de jugar al comienzo en un plantel frondoso, colmado de buenos jugadores. La recompensa por saber esperar le llegó y terminó dando la vuelta olímpica como titular en el Gumarelo, dirigido por el exitoso entrenador argentino Daniel Garnero, a quien destacó por su forma de trabajar y planificar.
“Tener la paciencia suficiente para esperar el momento. Desde el inicio, cuando el entrenador (Garnero) se anima a acompañarnos en este proyecto, viene con toda la ilusión. Nos da todas las herramientas. Al principio nos costó, por la manera como (Garnero) planifica y hace su trabajo. El equipo fue nutriéndose de todas esas variantes, que puede uno plasmar en el terreno de juego. El equipo, por momentos, muestra lo que el profe quiere. Estamos en crecimiento, ojalá que esto sea un punto de partida. Un hábito para seguir consiguiendo cosas importantes”, dijo Mejía. Por su parte, Sebastián Ferreira, quien marcó un gol en el último partido ante Luqueño, pero terminó expulsado, valoró la conquista del torneo Apertura para Libertad.
“Logramos el objetivo de meternos en octavos de final (Copa Sudamericana). El resumen de todo el torneo fue este partido (contra Luqueño). Llegamos mucho, tuvimos ocasiones e hicimos los goles de la forma que nos piden. Juegue quien juegue, se demostró que estamos todos de la misma forma para encarar los partidos”, resaltó Ferreira.
Mañana a las 12:00, se sortean los octavos de final de la Copa Sudamericana y Libertad conocerá a su rival.