Hay una autocrítica constructiva y coincidencia en que falta afinar la puntería a la hora de la definición en los partidos. Libertad, puntero del torneo Apertura, empató (1-1) con Guaraní, dio vuelta la página y ahora enfoca su preparación para afrontar una seguidilla de partidos en dos frentes. El mes de abril se viene bastante cargado para los gumarelos, con desafíos más que importantes.
Lo primero es el clásico blanco y negro del próximo sábado frente a Olimpia, que marcará al inicio de la segunda rueda del torneo Apertura. Inmediatamente después, en la siguiente semana, comienza la serie de dos partidos (ida y vuelta) frente al colombiano Atlético Nacional de Medellín, correspondiente a la fase tres de la Copa Libertadores de América, serie que otorgará al mejor el boleto para tomar parte de la fase de grupos de la competición internacional.
El presidente Rubén Di Tore analizó el último partido frente a Guaraní. “El planteamiento de Garnero (el DT) convence, solo hay que corregir algunas cosas. Tenemos muchas falencias, estamos fallando en la definición”, admitió el titular albinegro en declaraciones a Versus Radio por la 970 AM.
El alto directivo también reconoció las virtudes del rival y se quejó del arbitraje, aunque no quiso excusarse en este segundo punto. “Guaraní también jugó bien, nos complicó y se nos vino encima”, agregó. Informó que “se va a evaluar con el área médica para ver qué equipo va a parar el técnico para la seguidilla de partidos que vamos a tener”, indicó.
RIVALES DIRECTOS
Por el torneo Apertura, después del partido con Olimpia, a Libertad le espera Guaireña y acto seguido Cerro Porteño. Se trata de rivales directos, que estos equipos vienen asechando desde atrás en la pelea por los primeros lugares en la tabla.