El equipo de Guaraní recupera su mística de la mano de Gustavo Costas y llega fortalecido para el encuentro de semifinal ante Guaireña, que mostró contundencia en el inicio del juego ante 12, pero después sufrió.
El Aborigen con el pan dulce bajo los brazos debe seguir trabajando, porque el objetivo es llegar al partido del 30, que define el título del Clausura.
Ver que el equipo mejora motiva al entrenador y especialmente porque se puede apreciar en los partidos complicados.
“Estoy feliz por el resultado conseguido ante Libertad. Al inicio estaban mejor que nosotros, pero a partir de los 15 minutos fuimos superiores. El segundo tiempo jugamos de maravilla. Estoy orgulloso y feliz por el partido que hicimos. Fue uno de los mejores partidos, siempre contra los grandes jugamos con intensidad. Esta vez le ganamos a un gran equipo. Es un equipazo, casi dos equipos, con grandes jugadores”, resumió Costas.
El desgaste que generó el partido es la preocupación porque se disputan partidos muy intensos. La prioridad ahora es recuperar a los jugadores.
“Ahora descansar, recuperarnos y concentrarnos bien. La cabeza ahora es llegar al 30 (fecha de definición del torneo) de la mejor manera”, explicó el estratega argentino, quien confesó que a su equipo le cuestan los partidos en donde sus jugadores no tienen la intensidad. Igualmente, contó que se consiguió la tranquilidad para enfrentar los compromisos sin enloquecerse.