- POR ÓSCAR GÓMEZ
- Periodista
- oscargomez@lanacion.com.py
Con un penal que dejó muchas dudas porque si hubo contacto fue mínimo, pero que fue ratificado por el VAR, Libertad respiró sobre el final y consiguió un agónico festejo en casa ante un River Plate que se plantó y en el trámite general, fue mucho mejor que su rival.
El equipo de Ramón Díaz nunca logró imponerse en su campo ante el equipo visitante, exceptuando los últimos minutos donde el cansancio hizo retroceder al Kelito y por obligación, el Guma fue al frente.
En el primer tiempo, las condiciones las impuso River. Aprovechando la velocidad de sus dos extremos y la potencia de sus dos atacantes, el Kelito consiguió generar las situaciones más claras de gol, convirtiendo incluso un par, aunque invalidados en ambas ocasiones por posición adelantada.
El mediocampo del Gumarelo, que tuvo el ingreso de Alexander Mejía y el adelantamiento de Daniel Bocanegra para jugar en la posición dejada por Nicolás Milesi, no tuvo su mejor noche. Estuvo lejos de generar circuitos de juego y como le costaba tener el balón, cuando el rival recuperaba, en el retorno sufrió porque no había contención.
En la complementaria, el ingreso de Villalba le dio algo de explosividad a los ataques de Libertad, pero el orden en la marca y la entrega contuvieron los embates gumarelos hasta que las piernas aguantaron. Viera aprovechó una pelota suelta en el área para empatar y Ferreira cambió por gol el penal que Samaniego sancionó.
CAMBIO DE ESCENARIO
Finalmente, Libertad disputará su primer partido de local en la Copa Libertadores en La Nueva Olla. Será el próximo 10 de febrero, desde las 21:30, ante el Caracas de Venezuela. El juego estuvo inicialmente programado para el Defensores del Chaco.