- POR IRENEO ACOSTA
Deportivo Santaní no quiere despedirse en forma prematura de la División Profesional. Jugó bien, remontó un 0-2 de visita en Villa Elisa para empatar y mantener sus pocas esperanzas de poder seguir el año que viene entre los mejores.
Sol de América dejó escapar una brillante ocasión para seguir sumando y asegurarse un cupo en la Sudamericana. Después de estar al frente con un 2-0, producto de los goles convertidos por Fredes en el primer tiempo y por Colombini en la etapa complementaria, el equipo dirigido por Pablo Escobar se metió atrás en busca de mantener la diferencia y cuidar el resultado.
Pero no se pensó que el mejor hombre del campo hasta ese momento, Gustavo Velázquez, iba a recibir una segunda cartulina amarilla y la roja por parte del árbitro Benítez. Desacomodó al equipo su salida y el técnico norteño Gauto, presionó con todo lo que tenía en busca de desestabilizar a los locales.
Los últimos minutos del segundo tiempo fueron arrolladores para los visitantes y preocupantes para los unicolores. Con Cazal, Pitta, Beltrán, Leguizamón, atacó con su potencial al máximo. Descontó por el chico Cazal con golpe de cabeza y ni con eso, Sol no mejoró. Se pasó malogrando oportunidades, porque no quisieron ceder los pases en los momentos justos.
Hasta que llegó el empate por conducto de Beltrán, ante la desesperación de los locales. Nuevamente le pasó a Sol lo mismo que le sucedió ante Luqueño. No supo mantener un resultado a favor y terminó perdiendo el partido. Servirá de lección. A Santaní le quedan pocas esperanzas, pero esperanzas al final.