De que hay un antes y un después en la historia reciente de Olimpia desde la llegada de Daniel Garnero al banquillo, no hay dudas. El DT argentino no solo volvió a colocar al Franjeado por encima de todos en el fútbol paraguayo de manera constante, algo que no pasaba desde finales del siglo pasado, sino que patentó un estilo de juego que nunca abandona. Ahora está cerca de alcanzar su cuarto campeonato consecutivo para ratificar dos años de dominio puro.
Y los integrantes del plantel principal franjeado, más aún los que están desde antes del 2018, sienten este cambio. Uno de los capitanes, Richard Ortiz, expresó su tranquilidad y felicidad de formar parte de este presente. “Desde que llegó Daniel Garnero al club cambió todo. Hay un gran ambiente en el vestuario y tenemos jugadores de gran nivel. Además, tenemos un sistema de juego que no abandonamos”, manifestó el volante en conversación con Universo 970 AM.
El clásico blanco y negro fue el partido número 102 de Daniel Garnero dirigiendo a Olimpia y su victoria 69. Su efectividad de puntos en estos 22 meses de competencia se mantiene por encima del 75%.
Mientras que en lo que va del Clausura, el Franjeado mantiene su marcha casi perfecta. Ya lleva 12 victorias y el domingo cerró una rueda entera sin derrotas.
La última la había sufrido en la fecha 4 ante Libertad. Con los siete puntos de ventaja sobre su escolta, va camino a conseguir un nuevo campeonato anticipado.
DESTACA LA REGULARIDAD
Rodrigo Rojas es cada vez más importante en el equipo de Daniel Garnero. En el clásico blanco y negro fue el punto más alto, jugando de vuelta en un gran nivel. El volante destacó la regularidad que viene mostrando el equipo decano.
“Cuesta mucho ser regulares y ser el equipo a vencer. No es fácil conseguir eso y nosotros logramos ser en la mayoría de los partidos superiores al rival. Y cuando no lo logramos, aparecen las grandes individualidades que tenemos en el plantel”, expresó a la 800 AM.
Dijo además que a lo largo del campeonato Olimpia “demostró ser un equipo serio y con la capacidad de resolver situaciones dentro del campo sin abandonar el estilo de juego”, ratificando que eso es lo que lo distingue de los demás.