El consumo regular de tomate implica sumar vitaminas y nutrientes al organismo debido a que la fruta no solo es versátil para la gastronomía, sino que brinda numerosos beneficios para la salud: conocé cuáles son. Se trata de un alimento compuesto principalmente por agua, que no aporta mayores calorías, por lo que es ideal para añadirlo a la dieta.

El tomate posee una importante cantidad de vitamina A, C y K, así como ácido fólico y tiamina, del complejo vitamínico B, según una investigación de la revista científica “European Journal of Preventive Cardiology”. También es fuente de minerales como potasio, manganeso, magnesio, fósforo y cobre, además de fibra y proteína dietética.

De ahí que el consumo diario del tomate y otros productos a base de este alimento reduce el riesgo de hipertensión en un 36 %. Esta capacidad se le atribuye al licopeno, un componente esencial de la fruta que bloquea la producción de sustancias que favorecen el aumento de la tensión arterial.

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El tomate no solo tiene propiedades beneficiosas para el corazón, también demostró que puede impactar positivamente en las funciones cognitivas. Una mayor ingesta de los antioxidantes presentes en la fruta se asocia con una tasa más lenta de deterioro cognitivo. Todos estos beneficios están especialmente vinculados a la especie del tomate perita.

Más allá de las recomendaciones, es importante consultar con un profesional médico o de la nutrición antes de incluir cualquier alimento a la dieta. El consumo de tomate puede estar contraindicado, por ejemplo, para quienes sufren de acidez estomacal, por lo que siempre es mejor guiarse por la opinión de los especialistas.

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