La causa detrás del molesto crujir o rechinar de dientes es el bruxismo, una afección oral que puede ocasionar el desgaste de las piezas dentales y convertirse en un trastorno del sueño. Se trata de un hábito involuntario, que se hace de forma inconsciente: conocé los detalles detrás de este padecimiento.

Según un análisis elaborado por la Facultad de Medicina de Harvard, desde el punto de vista físico, el apretar y crujir los dientes (características del bruxismo) es el signo de un mal funcionamiento del reflejo de masticación. De ahí se sugiere que el centro de control de los nervios no se apaga completamente durante el sueño y se producen los movimientos de masticación, de manera inconsciente, al momento de dormir.

Además del reflejo de masticación, el bruxismo puede ser el resultado de una combinación de factores físicos, psicológicos y genéticos: desde estrés y ansiedad hasta una mala alineación de los dientes u otros trastornos del sueño como la apnea obstructiva.

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El síntoma más evidente y común del bruxismo es el dolor en las encías y en la articulación mandibular. No obstante, cuando este trastorno se prolonga en el tiempo, puede tener consecuencias más serias, que van más allá de una simple molestia.

Para abordar el bruxismo, lo primero a tener en cuenta es la visita al dentista. Una vez confirmado el diagnóstico, es importante comenzar cuanto antes el tratamiento. No existe una cura única para el bruxismo, aunque hay disponibles una variedad de dispositivos y herramientas útiles como protectores bucales o hacer ejercicios de relajación y educación para el manejo del estrés.

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