A la par de los repelentes en crema, spray o aerosol, a la hora de ahuyentar a los mosquitos, también existen alternativas naturales muy efectivas, entre ellas la citronela, una hierba aromática comúnmente utilizada en el campo de la medicina natural por sus propiedades antisépticas, antibacterianas, digestivas y tónicas.

Se trata de una hierba aromática que se usa a menudo como un repelente natural de insectos. Su aroma característico es capaz de ahuyentar mosquitos o moscas y mantenerlos alejados de las personas y ambientes en los que se utilice. Con este objetivo, se puede utilizar la citronela en diferentes presentaciones: una de las más sencillas es plantar directamente la hierba en el jardín o en macetas para colocarlas en diferentes sitios de la casa.

Si se va a utilizar en forma de aceite esencial, la recomendación es diluirlo y no aplicarlo directamente sobre la piel. Se aconseja mezclarlo con un aceite de coco o de almendra para evitar posibles irritaciones cutáneas. También se puede colocar en difusores a fin de que el aroma se esparza en el ambiente.

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Además de ahuyentar insectos, según estudios botánicos, a la citronela se le atribuyen virtudes antisépticas, antibacterianas, diuréticas, antiespasmódicas, digestivas y tónicas, por lo que se aplica comúnmente para aliviar dolores reumáticos y combatir problemas de la piel como acné juvenil y la hipersudoración.

Más allá de los beneficios, cuando se va a utilizar la citronela como repelente, se deben tener en cuenta una serie de recomendaciones como, por ejemplo, evitar que la planta aromática tenga contacto con los ojos y otras áreas sensibles del organismo para evitar irritación. En caso de usar difusores, se deben mantener ventilados los espacios a fin de cuidar el sistema respiratorio.

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