La natación siempre fue considerada la actividad física más completa debido a que involucra grandes grupos musculares y pone en acción diversas capacidades. Entre sus múltiples beneficios, se descubrió que este deporte también puede ser muy útil para combatir el insomnio y lograr un buen descanso.
La natación es un ejercicio predominantemente aeróbico, de baja intensidad y alta resistencia. Al abarcar casi todos los grupos musculares, esta disciplina mejora la fuerza y la flexibilidad al mismo tiempo. También permite la liberación de neurotransmisores como la serotonina y la dopamina, que son reductores del estrés y otorgan la sensación de bienestar.
Según una investigación publicada en la revista científica “Healthline”, la natación favorece el buen sueño debido al esfuerzo aeróbico que implica su desarrollo. Al tratarse de un deporte que se practica en el agua, también se fomenta la sensación de relajación.
Lea también: ¿Qué enfermedades se pueden prevenir al utilizar protector solar?
Entre otros beneficios, la natación también ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares atendiendo a que mejora la presión arterial y la frecuencia cardíaca y previene enfermedades como el sobrepeso, la diabetes, la dislipemia y la artrosis. Se le atribuye igualmente la capacidad de prevenir enfermedades pulmonares e inmunológicas porque mejora la resistencia respiratoria.
Más allá de los beneficios de la natación, es importante consultar con un profesional médico antes de iniciar con la disciplina. Si bien se trata de un deporte completo, también tiene contraindicaciones. Con el “visto bueno” del doctor, se aconseja practicar la disciplina de forma gradual. Solo así se podrá aumentar la resistencia a medida que se avanza en el tiempo de entrenamiento.
Te puede interesar: No hay que esperar una lesión: la fisioterapia sirve para ganar calidad de vida