La banana es una de las frutas infaltables en la alimentación. Sus propiedades nutricionales la ubican entre las favoritas debido a su alto contenido en proteínas y lípidos, que pueden ser útiles en una dieta saludable, pero también en un plan específico para aumentar masa muscular.
Según un estudio del Hospital Universitario La Paz en Madrid, que fue replicado por la prensa internacional, la ingesta diaria de una banana contribuye a alcanzar el consumo recomendado de tres piezas de fruta al día, aportando valores nutricionales óptimos en cuanto a vitaminas.
La banana cuenta además con glucógeno, un hidrato de carbono semejante al almidón que ayuda a la reserva energética. Su elevado índice glucémico otorga “combustibles” al músculo, otorgando así energía que favorece el aumento de peso. Si bien no tiene una incidencia directa en el aumento de la masa muscular, su función es brindar mayor energía al cuerpo y facilitar el entrenamiento.
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Comer banana no aumenta directamente los músculos, pero ayuda a incrementar el rendimiento en el gimnasio. Esta fruta tiene además varios beneficios para la salud: se destaca por su riqueza en potasio, un mineral que ayuda a la función de los nervios, a la contracción de los músculos y a que el ritmo cardiaco se mantenga constante. La banana también es rica en vitaminas A, B6, C y D.
En cuanto a la manera de consumir la fruta, es usual que se ingiera de manera individual o combinarla en batidos, panes o con cereales. Los deportistas pueden consumirla además antes o después de la actividad física. Antes de introducirla a la dieta, lo ideal es que se consulte con un entrenador o un nutricionista para poder aprovechar todos sus beneficios.
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