Las fiestas de fin de año suelen tener la comida como una de las protagonistas. Tener precaución con los excesos es fundamental para evitar problemas estomacales, especialmente cuando se trata de cuidar a los niños, quienes aún no están preparados para digerir grandes cantidades de harina, azúcar y grasas propias de los menús de la temporada.
Según explicó el pediatra Robert Núñez a través de las redes sociales, la principal recomendación es preparar un “menú exclusivo” libre de condimentos para cuidar la salud digestiva de los niños en estas fechas y prevenir alergias o indigestión. “A los niños les encantan los festejos y sabemos que durante las fiestas quizás consumen una cantidad extra y variada de alimentos diferentes a su alimentación diaria, que a su cuerpo y pequeños órganos les dificulta digerir”, recordó.
El profesional médico hizo énfasis en que los niños tienen diferencias fisiológicas en sus sistemas digestivos en comparación con los adultos, por lo que es crucial cuidar su alimentación. “La producción de enzimas digestivas aún está desarrollándose en los niños, lo que puede afectar la descomposición de ciertos alimentos. Es crucial adaptar la alimentación a las necesidades específicas de cada etapa del desarrollo infantil”, recalcó.
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Síntomas de indigestión o empacho
La indigestión o “empacho” suele producirse cuando el niño comió en exceso o consumió alimentos que no le “sientan bien”, detalló el pediatra. Los síntomas más frecuentes de esta condición son el dolor de estómago, distensión (hinchazón) abdominal y gases, náuseas y vómitos, dolor de cabeza, falta de apetito, diarrea o estreñimiento.
En estos casos, además de acudir a la consulta pediátrica, es importante cuidar la hidratación de los niños, pero no ofrecer bebidas energizantes, ni azúcar, sino agua. Igualmente, es crucial cuidar la alimentación y evitar embutidos y comida recalentada o que contenga mayonesa.