Para cuidar de las rodillas y fortalecer al mismo tiempo los huesos del cuerpo, no solo se debe adoptar una alimentación saludable y realizar ejercicios con regularidad, sino también reforzar el consumo de ciertos nutrientes: desde la vitamina A hasta la D, todos estos compuestos son fundamentales para estimular la salud ósea y la movilidad del cuerpo.

Entre los nutrientes más recomendados, se destaca la vitamina A, que ayuda a la formación y mantenimiento de dientes, tejidos óseos y blandos, membranas mucosas y piel sanos, según estudios médicos. Ciertos alimentos como el salmón, los productos lácteos y las frutas y verduras de color naranja y amarillo son una buena fuente de este nutriente.

Para fortalecer los huesos y articulaciones, además de estimular el engrosamiento de los cartílagos, resaltan las vitaminas que pertenecen al grupo B, que son nutrientes indispensables para el sano funcionamiento de estas estructuras complejas del cuerpo. La carne roja magra, el brócoli y los huevos son una excelente fuente de vitaminas del grupo B.

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La vitamina D también es fundamental para la salud ósea debido a que ayuda al cuerpo a absorber el calcio. Son muy pocos los alimentos que contienen esta vitamina en forma natural, pero está presente en pescados grasos como el atún y el salmón, así como en ciertos aceites vegetales.

Todos estos nutrientes también se encuentran disponibles en una variedad de suplementos y otros fármacos que pueden ser recetados únicamente por un profesional médico. Más allá de las recomendaciones, siempre es importante obtener el “visto bueno” de un doctor antes de iniciar con un tratamiento a base de vitaminas.

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