Los perros aportan mucho más que compañía: su presencia contribuye a diminuir el estrés y puede ayudar a mejorar la salud de sus amos de distintas formas. No obstante, aunque son animales de gran sensibilidad, pueden reaccionar de manera esquiva o, incluso, agresiva ante situaciones que no soportan. Conozca cuáles son los aspectos que los perros odian de la convivencia con sus dueños.
Los canes tienen un sentido de audición excepcional y muy sensible, según importantes estudios. Por este motivo, odian los molestos ruidos que pueden generar los humanos en la rutina diaria: desde el secador del pelo hasta el sonido de la aspiradora. Hay que tomar los recaudos necesarios para proteger a estos peluditos de los efectos de estos sonidos.
Los perros son animales familiares y se acostumbran a la compañía permanente. Cuando permanecen solo por mucho tiempo, experimentan sentimientos de nostalgia, ansiedad y sufrimiento. Odian la ausencia de sus amos, por lo que esperan con ansias su llegada y se emocionan ante el reencuentro.
Leé también: Guardar en secreto una buena noticia puede ser beneficioso para la salud
Estos peluditos también se molestan cuando les tiran los bigotes, los labios o les muevan el hocico. A veces, sus dueños suelen hacerlo en forma de juego, pero los perros se ponen tensos cuando reciben esta clase de gestos. Se trata de actitudes que físicamente bloquean sus sentidos y su movilidad, por lo que los ponen en alerta. Algunas veces pueden reaccionar de manera agresiva como un gesto de defensa.
Más allá de estos aspectos, sin dudas, convivir con un perro verdaderamente puede transformar la dinámica del hogar. Existe una conexión única entre los canes y sus dueños, que está basada en aspectos como la compañía, el amor, el cariño y la alegría.
Te puede interesar: Esta es la hierba que ayuda a aliviar los dolores articulares