El kiwi puede aportar numerosos beneficios a la salud del organismo: es rico en antioxidantes, fibra dietética y, sobre todo, vitamina C. Esta fruta puede ayudar a la función inmunológica, bajar la incidencia y la gravedad de numerosas enfermedades, principalmente en lo que refiere a los cuadros respiratorios.
Según investigaciones de la Universidad de Oslo, una pieza de kiwi aporta más vitamina C de la que se necesita al día: unos 60 mg. Este nutriente le confiere a la fruta propiedades antioxidantes y beneficios para el sistema inmunitario, por lo que está especialmente recomendada para combatir el asma y otras afecciones respiratorias.
Los kiwis contienen además un compuesto denominado “actinidina”, capaz de descomponer proteínas y mejorar la digestión. Por su alto contenido de fibra, es ideal para combatir el estreñimiento. A esta fruta también se le atribuye la capacidad de fortalecer la coagulación sanguínea y, por ende, estimular la función del sistema circulatorio.
Lea también: ¿Por qué los pájaros duermen de pie?
Debido a que el kiwi tiene potasio, significa que es un alimento que ayuda a mantener el sistema cardiovascular. La evidencia científica vincula el consumo regular de potasio con un riesgo reducido de accidente cerebrovascular y enfermedad coronaria.
Como todas las frutas, el kiwi es una buena fuente de antioxidantes. Esto significa que comerlo con regularidad puede ayudar a reducir la inflamación, que puede causar deterioro cognitivo y otras enfermedades. Esta fruta es deliciosa gracias a su sabor agridulce único y vale la pena tener en cuenta sus beneficios para cuidar de la salud durante todo el año.
Te puede interesar: ¿Tenés uñas quebradizas? Esta es la vitamina para fortalecerlas