El “árbol de la felicidad” o “palo de Brasil” es popular por ser utilizado como una especie de amuleto de la buena suerte y por darle armonía al lugar donde se lo ubica. Se utiliza para atraer las buenas energías, según las cualidades que le atribuye la filosofía del Feng Shui.
Esta doctrina que procede de China, basada en un poema antiguo acerca de la vida humana y su conexión con la naturaleza, destaca las energías que rigen el mundo y menciona que cada planta tiene vibras específicas que influyen en el equilibrio de nuestros espacios. En este caso, al “palo de Brasil” le concede la capacidad de atraer buenas energías.
Según esta filosofía, la mejor ubicación del “árbol de la felicidad” dentro del hogar es cerca de la entrada, para atraer felicidad y prosperidad, mientras que para un negocio o emprendimiento se recomienda colocar la planta en un lugar con orientación hacia el noroeste. Con los cuidados necesarios, el “palo de Brasil” puede crecer hasta seis metros, pero dos si está dentro de una maceta.
El cuidado del “árbol de la felicidad” será fundamental para hacer crecer la planta y aprovechar todos sus beneficios. Respecto al riego, lo más importante es que caiga en forma de lluvia y no bruscamente desde un vaso o un balde.
Se recomienda regar “el árbol de la felicidad” cada vez que la tierra esté completamente seca. El exceso de agua puede generar enfermedades para la planta. Además, durante el invierno, el riego debe disminuir, ya que el sustrato de la planta tarda más tiempo en absorber toda el agua.
Con respecto a la ubicación y la luz, se recomienda ubicar esta planta en algún lugar donde obtenga una luz indirecta. Esto se debe a que la luz solar directa puede dañar y quemar las hojas como consecuencia de la radiación.
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