Cada vitamina cumple una función fundamental en el organismo. No obstante, hay una muy especial que, aunque es poco conocida, aporta grandes beneficios al cuerpo humano: se trata de la vitamina F, un complejo de nutrientes relacionados con la salud de la piel, el órgano más extenso del cuerpo.

Específicamente, no se trata solo de una vitamina. En este compuesto se reúnen o acumulan muchos otros nutrientes que son de vital importancia para el correcto funcionamiento del organismo. Al ser un conjunto, está compuesto en parte por omega-3 y omega-6, según la revista científica especializada “My Protein”.

Los niveles correctos de vitamina F fortalecen el sistema nervioso y mejoran los problemas asociados al envejecimiento. Este complejo de nutrientes tiene un papel fundamental en cosméticos debido a su capacidad para estimular la barrera natural de la piel, contribuyendo a mantenerla nutrida e hidratada, además de a atenuar la formación de arrugas y manchas.

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Algunos de los alimentos en los que se puede encontrar la vitamina F son los aceites de oliva, la soja,el lino, el maíz, el girasol o la nuez. Otras fuentes de este complejo de nutrientes serían el salmón, el atún y otros pescados. Los frutos secos como las almendras y las semillas de girasol también la contienen.

Antes de incluir ciertos nutrientes a la dieta, siempre es importante consultar con un profesional médico para determinar cuál es la mejor manera de hacerlo. A la par, no hay que olvidar que una alimentación saludable que incluya frutas, verduras, lácteos, carnes y pescados también es una gran fuente de nutrientes.

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