El aceite de coco es ideal para hidratar el cabello, eliminar el “frizz” y acelerar el crecimiento del pelo, ya que tiene nutrientes y vitaminas esenciales para la salud capilar. Utilizando este aceite vegetal junto a otros ingredientes naturales, se puede obtener una mascarilla con innumerables beneficios para lograr una cabellera saludable.
Según importantes estudios, el aceite de coco es uno de los mejores nutrientes para el cabello, pues aporta proteínas necesarias para sanar el pelo dañado, estimulando la renovación capilar. Debido a sus múltiples propiedades, este extracto natural es muy utilizado por la industria para la fabricación de diversos productos como cremas o acondicionadores.
No obstante, para aprovechar al máximo sus beneficios, se recomienda la realización de una mascarilla a base de aceite de coco, con otros ingredientes que puedan potenciar sus efectos. De acuerdo con la sugerencia de portales médicos, en una olla hay que agregar el aceite vegetal junto a una taza de agua con dos cucharadas de maicena y mezclar hasta que se espese. Una vez que se obtiene la pasta, se aplica esta mascarilla sobre el cabello sucio de medios a puntas y se deja actuar por 30 minutos.
Lea también: Este es el superalimento rico en proteína para prevenir la anemia
Lo más aconsejable es utilizar agua tibia, que no supere los 36 ºC, para retirar la mascarilla del cabello, con el propósito de sellar los nutrientes en las cutículas y conseguir así más brillo. Sobre el secado, se recomienda no frotar el pelo cuando está mojado, ya que es mucho más sensible y propenso a la ruptura. Lo ideal es emplear una toalla de microfibra y envolver el pelo para que vaya absorbiendo la humedad.
Al igual que el aceite de coco, existen diferentes vitaminas que ayudan con el cuidado del cabello, como las que pertenecen al grupo B: B2 (riboflavina), vitamina B3 (niacina), vitamina B5 (ácido pantoténico), vitamina B6 (piridoxina), vitamina B7 (biotina), vitamina B9 (ácido fólico) o la B12 (cobalamina).
Te puede interesar: ¿De qué color está tu lengua?: El tono podría ser signo de enfermedades