Los rompevientos son una prenda útil resistente al agua y al viento que puede protegernos, además son livianos y versátiles. Aunque la mayoría de este tipo de camperas son bastante duraderos y no se dañan por la acumulación de polvo y suciedad, sí necesitan de una buena limpieza de vez en cuando.
Antes de meter el rompevientos a la lavarropa, es muy importante revisar la etiqueta de cuidado para saber si realmente es recomendable este método o debe lavarse a mano. Si la prenda tiene manchas, es momento de aplicar una pequeña cantidad de jabón líquido para ropas sobre ellas, dejándolo reposar de 5 a 10 minutos, luego de haber frotado suavemente.
Los rompevientos a menudo están hechos de nailon u otras telas sintéticas que pueden rasgarse fácilmente, también suelen tener muchos botones y cremalleras que pueden engancharse y dañar incluso el electrodoméstico. Para evitar todo esto, coloca la prenda dentro de una bolsa de lavandería de malla antes de encender la lavarropa, y si no tienes este elemento, puedes dar la vuelta a la campera antes de comenzar el lavado.
Agrega la cantidad necesaria de jabón líquido suave y selecciona un ciclo de lavado suave. Al terminar, no seques en la secadora porque esto podría encoger el material y estropear la prenda, tampoco cuelgues bajo la luz solar directa. La recomendación es secarlo colgado en la sombra.
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Más sugerencias para cuidar tu rompevientos
Si se rompe, no todo está perdido. Se pueden colocar parches adhesivos de nailon encima del desgarro para repararlo y garantizar que la campera siga siendo impermeable y resistente al viento. Cuando no lo estés usando, déjalo colgado y evita que se arrugue.
Otro dato importante es que no necesitan lavarse con frecuencia gracias a su composición, que a menudo es un tejido sintético resistente a la suciedad. Lava tu rompevientos solo cuando notes mucha suciedad o mugre, o cuando tenga un olor desagradable, y si no estás seguro que se puede lavar en la lavarropa, lávalo a mano en la pileta o en una palangana, evitando utilizar un lavado de ciclo fuerte o un enjuague con agua caliente, ya que pueden dañar el tejido.
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