Andrea Weiler Gustafson se crió entre el campo y la ciudad porque sus padres son productores agropecuarios, por lo que el campo siempre fue parte de su normalidad. Aseguró que siempre le gustaron los animales y desde chiquitita juntaba escarabajos, trataba de coleccionar lo que encontraba, los de distintos colores.
“Andaba un poco en esas cuestiones y trataba de ir aprendiendo. Era superapasionada de los animales, rescataba perros, gatos y eso me llevó poco a poco en ir buscando el camino y cuando terminé el colegio en 1990, inmediatamente inicié la facultad y me recibí de bióloga en 1994”, empezó contando la bióloga paraguaya que hoy protagoniza como Mujer destacada de La Nación.
Es egresada de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional de Asunción (Facen-UNA) y realizó su maestría en ciencias en la Universidad Estatal de Nuevo México, en Estados Unidos. En la actualidad es estudiante de doctorado de la Universidad de Salamanca, en España, y se desempeña además como docente e investigadora en la UNA.
Leer más: Mujer destacada: hermana Regina, 45 años luchando contra las adicciones en Paraguay
“Al recibirme viajé a los Estados Unidos e hice una maestría en manejo de fauna silvestre con una beca parcial del rectorado de la UNA. Al retornar me acerqué a la UNA a decir que estaba de vuelta y a ofrecer retribuir esa formación que me ayudó la universidad a pagar y me contratan en 1998. Tengo, más o menos, 26 años en la UNA”, sostiene.
Empezó como técnica encargada de un laboratorio, después concursó para ser profesora y hoy en día es profesora titular, investigadora y directora de posgrado.
Conservación de la biodiversidad
La entrevistada dijo que, dentro de sus investigaciones, haciendo referencia a lo que es su vida y que conoce la parte de los productores, el campo y también se formó en el área biológica, entonces es ahí donde termina siguiendo esta línea de investigación que es la de conservación de la biodiversidad en áreas productivas agrícolas y ganaderas.
“Lo que estoy tratando de hacer con mi trabajo y las investigaciones es determinar qué se puede conservar en las zonas productivas, cómo podemos mejorar nuestras relaciones con el medioambiente y cómo producir y conservar o tratar de causar el menor impacto a la naturaleza. Eso es justamente lo que yo trabajo y tengo un laboratorio con unos chicos que me apoyan muchísimo y yo de paso les voy formando profesionalmente”, agregó.
Jaguarete: peligro crítico de extinción
Andrea resaltó que le encanta el campo y las relaciones de los animales con el hábitat. “Yo trabajo mucho con varias especies, pero para mí el jaguarete es una especie que es sumamente importante y que me atrae muchísimo en la investigación. Muchos de mis proyectos van direccionados a ellos, es una especie que por su naturaleza y su gran tamaño necesita mucho hábitat y que causa conflicto con los productores agropecuarios. Esa es una especie que a mí me atrae mucho”, confesó.
Remarcó que el jaguarete está en peligro crítico de extinción en Paraguay. “Nosotros estamos llevando adelante con un grupo de ciudadanos un movimiento que se llama Somos Jaguarete y lo que se trata es crear conciencia sobre la importancia del jaguarete con nuestras raíces culturales. El jaguarete no es una especie nomás, es parte de nuestras raíces, nuestra cultura y aparte es un componente importantísimo en el ecosistema porque es una especie que regula a muchas otras poblaciones de animales silvestres”, enfatizó.
Premio sobre mamíferos
Como está haciendo su doctorado en la Universidad de Salamanca en Biología y conservación de la biodiversidad, mencionó que parte de su tesis doctoral es estudiar las relaciones de las comunidades en mamíferos en ambientes ganaderos del Chaco. “Este trabajo doctoral es el que fue reconocido por la Asociación Paraguaya de Mastozoología y a través de ellos me otorgaron el premio Carol & James Patton 2020”, expresó.
Explicó que es un premio de reconocimiento entre pares por el esfuerzo en la labor por el estudio de ese grupo. También le dieron el año pasado en el Premio Nacional de Ciencias, una mención de honor por el mismo trabajo.
Familia y otras actividades
En cuanto a su entorno familiar, Andrea señaló que tiene una familia grande, constituida por 7 hijos, 4 mujeres y 3 varones. Además de tener 2 perros y 2 gatos. Se casó joven, a los 20 años, antes de viajar a los Estados Unidos. Contó que una mujer y dos varones están vinculados a la carrera de veterinaria, al igual que su marido. Por otra parte, dos de ellas están en el mundo de la medicina, otra estudia arquitectura y el más pequeño está en edad escolar.
También comentó que otra actividad que le gusta mucho es la cocina. “Me encanta cocinar, compartía mucho tiempo con mi papá, que era el que se encargaba de cocinar, es un gran chef y ahí fui aprendiendo un poco de la cocina y me relaja, disfruto mucho de eso”, señaló.
Leer también: Bióloga Andrea Weiler recibe premio por destacado trabajo con mamíferos en Paraguay
Perseguir los sueños
Como mensaje final, la bióloga destacó que uno en la vida tiene que procurar seguir sus sueños porque solamente así se es feliz. “Todas las otras cuestiones como que te satisfacen momentáneamente pero si uno persigue sus sueños, su vocación, aunque sea duro lo que uno se propone en la vida y te puede llevar muchísimo tiempo en llegar a eso, pero mientras uno siga eso es donde va a encontrar la verdadera felicidad”, confirmó.
Manifestó que siempre la familia es fundamental porque es el sostén de cualquier persona. “Es un bien que hay que atesorar, cuidar y valorar”, puntualizó.