R. Kelly, la desprestigiada estrella del R&B que se enfrenta a una batería de cargos de abuso sexual en varios estados de Estados Unidos, compareció el lunes ante un tribunal al comenzar la selección del jurado de su juicio federal de Nueva York.
Vestido con un traje azul marino, el hombre de 54 años parecía estoico mientras comenzaba el interrogatorio de los jurados en el tribunal de Brooklyn, donde se enfrenta a cargos de crimen organizado, explotación sexual de un menor, secuestro, soborno y trabajos forzados, que abarcan desde 1994 hasta 2018.
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El abogado de Kelly, Deveraux Cannick, se mostró reticente cuando la AFP le preguntó cómo se sentía y, sonriendo, dijo: “Sólo un lunes más”. El músico, nacido Robert Sylvester Kelly y actualmente encarcelado en una prisión federal de Brooklyn, ha negado todos los cargos.
Todos los posibles miembros del jurado permanecerán en el anonimato y estarán parcialmente aislados durante el proceso. Está previsto que los testimonios comiencen el 18 de agosto. Nueva York es el primer estado en el que se juzga a Kelly en relación con una reciente serie de acusaciones estatales y federales en cuatro jurisdicciones diferentes.
Se le acusa de haber abusado de seis mujeres, que han permanecido en el anonimato. Se cree que la “Desconocida nº 1” es la cantante de R&B Aaliyah, que murió en un accidente de avión a los 22 años en 2001. La acusación alega que Kelly pagó a un empleado del gobierno de Illinois en 1994 para obtener un documento de identidad falso para casarse con una menor de edad. Kelly se casó con Aaliyah cuando ella tenía 15 años y él 27, una unión que posteriormente fue anulada.
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La acusación de Nueva York detalla escabrosas afirmaciones según las cuales Kelly operaba una red criminal que sistemáticamente reclutaba y preparaba a las jóvenes para que tuvieran relaciones sexuales con él. Las encerraban en sus habitaciones en los hoteles cuando él estaba de gira y les instruían que lo llamaran “papá”. Muchas de las “reclutas” eran menores de 18 años, afirman los fiscales.
La acusación también dice que parte del trabajo de la red consistía en aislar a las niñas y mujeres y que las hacía “depender de Kelly para su bienestar financiero”. Los jueces federales de Nueva York y Chicago, donde Kelly también se enfrenta a cargos, le han denegado la libertad bajo fianza alegando riesgo de fuga, entre otros motivos. Kelly se ha enfrentado durante décadas a acusaciones relacionadas con la pornografía infantil, el sexo con menores, el funcionamiento de una secta sexual y la agresión sexual.
Fuente: AFP.