Existen casos de personas que sufren de pérdida del cabello tras lograr recuperarse del COVID-19, por lo que la doctora Rosalba Riveros, dermatóloga de la Cátedra y Servicio de Dermatología del Hospital de Clínicas de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Asunción, dio a conocer acerca de los cuidados que se deben tener de ser así.
“Hay que recordar que el pelo posee tres ciclos, el anágeno, donde el crecimiento es activo; la fase del catágeno, que es cuando el pelo muere, y el telógeno, que se encuentra un porcentaje de 10 a 15% de pelos y en esta etapa la caída puede durar tres meses. Para determinar la causa de la pérdida de cabello, se deben tener en cuenta estos ciclos”, indicó la especialista.
Es noticia: Tatiana Aquino fue coronada como “Miss Gordita 2021″
Riveros explicó que tras el proceso del COVID-19, por tratarse de un caso infeccioso, este puede ocasionar que el ciclo del pelo se detenga, ya que el cuerpo se vio afectado de diversas maneras a causa del virus. Es por eso que en algunos casos las personas presentan caídas del cabello en mayor cantidad.
Al mismo tiempo, remarcó que la caída de cabello no es propiamente del COVID-19, sino que también puede tener otros orígenes. Por eso, si la misma es persistente se deben aplicar ciertas evaluaciones y estudios a los pacientes para determinar la causa exacta, por lo que acotó: “Es importante que el paciente pos-COVID pueda realizar un hemograma, así como un tricrograma capilar o una biopsia en caso de ser necesario”.
Leé también: Amazon Prime Video estrenará última película de Evangelion
Entre las recomendaciones para la pérdida el pelo, la doctora señaló que es muy importante el consumo de multivitamínicos, zinc, así como lociones y tópicos, al igual que el minoxidil. También recalcó que es importante la consulta con un especialista para indicar el procedimiento a seguir para brindar mejores resultados al tratamiento.
Se debe tener en cuenta que, en muchos casos, haber sido COVID-19 positivo es un proceso en el que las personas han generado cierto grado de estrés, lo cual también puede desembocar en una alopecia, ocasionando la caída del cabello.