Según algunos estudios, en los próximos años el trabajador será considerado por las empresas como su más importante inversor: es decir, invertirá en su capital intelectual y, lógicamente, aguardará su rendimiento a cambio.
Al tener en cuenta esto es importante considerar ciertos aspectos del ámbito laboral como por ejemplo cuestionarse ¿qué hace que el colaborador renuncie a la compañía?
Es noticia: Alerta Roja: reuniones sociales, factor detonante de nuevos brotes de COVID-19
Existe un dicho que reza “Los empleados no renuncian a su trabajo, renuncian a sus jefes”. Y al parecer no está lejos de la realidad, ya la gran mayoría de los profesionales del área de Recursos Humanos coinciden en que “los buenos colaboradores huyen de los malos jefes”.
Varios son los factores que influyen para que una persona renuncie a su empleo. Existen ciertos aspectos que son importantes en el campo laboral, ya que implica la permanencia del empleado y sus posibilidades de crecimiento y estos sumen al desarrollo de la empresa.
Te puede interesar: “San Juan desde tu vehículo” es la propuesta en el Centro Cívico de Encarnación
¿Porqué renuncian?
Jefes herméticos: es decir, no se encuentran abiertos al diálogo y a la escucha activa de los aportes de sus colaboradores. A la vez, poco preparados, no se actualizan ni buscan mejorar, anulando la posibilidad de desarrollo y aprendizaje de su equipo, lo que genera frustración en sus colaboradores.
También son conocidos como jefes egoístas, porque solo buscan brillar a costa de su equipo, nutriéndose de ellos para sobresalir sin reconocer a las personas y sus esfuerzos.
Salario no acorde al trabajo realizado: cuando la persona recibe un salario por debajo de lo que el mercado está pagando por su gestión o cargo. No acompaña las horas de trabajo y el alcance de sus funciones con una remuneración correspondiente. No se tienen beneficios sociales o bonificaciones que motiven al funcionario.
La falta de valoración: sucede cuando no se recibe el estímulo positivo por la gestión realizada, lo que causa desmotivación en el funcionario. También es importante manejar las expectativas vs. realidades, considerando las condiciones dadas.
Un mal ambiente laboral: hoy día este punto es muy importante en las desvinculaciones de las personas en las empresas. La presión, sumada al estrés en exceso, entre otros factores, terminan por agotar al empleado, por lo que suele ser una de las principales causas de renuncia.
Escasa o nula posibilidad de crecimiento profesional: cuando no existe un plan que acompañe el desarrollo profesional del personal, es otro de los elementos fundamentales. Este tema es muy valorado, sobre todo en los jóvenes cuya carrera profesional se inicia.
Estos son algunos de los puntos más destacados a la hora de decidir mantenerse o renunciar a una firma. Como conclusión, la experta en gestión de talento, Deysi González, indicó que “el trabajador motivado que difícilmente querrá cambiar de trabajo es el que en una empresa sabe bien adónde va, cómo contribuye y que se cuenta y se comparte el éxito con él”.