Los hay en distintos materiales y para diversos usos (para microondas, freezer, etc.) pero no siempre uno solo nos sirve para todo. Aquí develamos sus secretos para que nos duren mucho tiempo.
La arquitecta y organizadora profesional, Cintia Estay, más conocida como Vive Simple (gracias a su blog sobre la vida hogareña) nos resalta que cometemos muchísimos errores sin saber, y nos menciona los más 3 comunes: Acumular un número excesivo recipientes herméticos de dudosa calidad y en mal estado (rotos, quemados, con olor, sin tapa, etc.); escatimar en la calidad y sacrificar la hermeticidad, por cuestiones estéticas muchas veces; no comprobar que tengan los sellos obligatorios que nos permitan verificar que sean libres de bisfenol A (BPA Free), aptos para microondas, aptos para lavavajillas, aptos para freezer.
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¿Cómo cuidar mejor nuestros recipientes herméticos?
1.No todos los recipientes plásticos son aptos para todo, algunos son sólo para almacenamiento de alimentos, pero no para contener cuando están calientes o para microondas, ya que al calentarse liberan sustancias tóxicas.
2.Otros son exclusivos para el freezer debido a que resisten bajas temperaturas que podrían quebrar a otros que no fueran aptos para congelamiento.
3.Algunos son sólo para almacenar objetos y no son aptos para alimentos o bebidas: como los que se usan para guardado en depósitos, placares, archivos, etc. Hay que aprender a diferenciarlos.
4.Cuando trasvasamos alimentos a recipientes herméticos, es importante rotularlos con nombre y fecha de caducidad del alimento, para evitar accidentes, intoxicaciones y pérdidas de tiempo. Lo mismo para los que van al freezer, deben llevar la fecha de preparación.
5.Debido a que también existen recipientes de vidrio para almacenamiento, siempre hay que comparar ventajas y desventajas de los mismos, ya que son más pesados y peligrosos para la manipulación. Un pedazo de vidrio en zona de preparación y cocción de alimentos puede equivaler a un grave accidente por corte o ingestión. En casas con niños o mascotas, con mayor razón se debe evaluar esta posibilidad como de alta importancia.
6.El lavado debe hacerse siempre con detergentes neutros y evitar esponjas abrasivas, ya que esto puede dañar el material, acortando su vida útil.
7.Evitar los cruces de uso, esto es, recipientes que vayan a contener carnes, huevos, embutidos, etc., no deberían ser usados para otros alimentos. Designar usos específicos.
8.Elegir formas circulares desperdicia espacio. Las formas rectangulares ayudan a optimizar el almacenamiento. Es bueno elegir juegos completos, ya que usualmente están diseñados para apilarse de manera eficiente y para encastrarse o guardarse eficazmente.
¿Hay algo que NO se deba almacenar en ellos?
En el caso de los alimentos, si el recipiente es apto para alimentos, de buena calidad y se respetan sus usos detallados en los símbolos (microondas, freezer, almacenamiento), el uso es completamente seguro y recomendable para la organización e higiene de alimentos.
“La tecnología y materiales de algunas marcas ha dejado en el pasado la creencia de que determinados alimentos no pueden guardarse en recipientes plásticos porque puede haber contaminación o transferencia de toxinas. Claro que, en casos de que la procedencia y calidad sea dudosa, esto no está garantizado. Los recipientes herméticos de buena calidad para almacenamiento, conservación y organización de alimentos son una inversión en practicidad, salud y economía”, señala.
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