Dos producciones de Hollywood, The Morning Show y Bombshell, serie y película respectivamente, salieron el año pasado con un elenco de primera y con un tema en común: el acoso laboral. Te compartimos las lecciones que nos dejaron y te animamos a verlas.


Jazmín Gómez Fleitas

jazmin.gomez@gruponacion.com.py

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Alguna vez en la vida, como mujer, todas vivimos que alguien nos haya tocado al subir en el colectivo, al estar en la parada, alguien que nos siguió en la calle o que nos gritó cosas obscenas; o alguien que se nos acercó demasiado en la oficina e intentó ir más allá de lo que debía en un círculo que, debería ser de mayor confianza que el de la calle.

Como mujer, es imposible quedarse al margen de este tipo de situaciones. En este contexto, The Morning Show y Bombshell exploran la complejidad del acoso laboral e invitan a la reflexión como sociedad.

La primera es una serie de Apple+ protagonizada por Jennifer Aniston, Reese Witherspoon y Steve Carrell. Se trata de una ficción, un drama, en el cual los presentadores de televisión se ven involucrados en una cultura que acalla estos hechos. Mientras que la segunda, es una película producida y protagonizada por Charlize Theron, junto a Nicole Kidman y Margot Robbie, que está inspirada -nada menos- que en el caso real de la cadena Fox News en Estados Unidos.

Estas dos historias hay que compartirlas con los hombres de nuestro entorno, con los padres, hermanos, novios, amigos y compañeros de trabajo, para que puedan ver y entender, y quizás sentir a lo que las mujeres están expuestas. Y que se trata, simplemente, de que las mujeres buscan ser tratadas con respeto y no como objetos sexuales.

Recordemos que desde que salieron a la luz los hechos que desencadenaron el movimiento Me Too en Estados Unidos, a raíz de las más de 90 mujeres que denunciaron al productor de cine Harvey Weinstein desde el año 2017 y, gracias a las investigaciones de dos periodistas del New York Times que, el año pasado, publicaron el libro She Said -compilando todas las investigaciones realizadas para el medio informativo sobre Weinstein- el acoso laboral tomó relevancia en el cine, atendiendo a que había llegado a la más alta esfera del entretenimiento. ¿Quién podría librarse si hasta ahí sucedía?


1. Todas lo procesan de manera distinta

Si hay algo que The Morning Show desarrolla sumamente bien en el arco narrativo es que uno no se espera el desenlace. No se ve venir quién era la víctima más afectada, la que se callaba las consecuencias de lo vivido para que nadie la tratase diferente, quién las ocultaba sumamente bien pero que le impedía continuar con su vida quitando el trauma. En Bombshell, se ve desde la mirada de tres mujeres que, definitivamente, tuvieron experiencias distintas. Se enfrentaron al hecho desde distintos ángulos y eso es lo valioso. ¿Quién analiza con anticipación cómo reaccionaría si alguna vez le sucede algo así?

2. El monólogo consigo misma somos todas

En Bombshell, pocos segundos después de arrancar, vemos una conversación que tiene una periodista que está a punto de ser ascendida por su jefe. Sin embargo, el acoso es sutil y el monólogo que ella tiene consigo misma puede escucharse por encima de la conversación. Es una conversación interna que cualquier mujer podría haber tenido en una situación similar. Esa escena somos todas.

3. No vas a ser la única

Si hay un patrón que se repite en estos casos, es que el agresor no tiene sólo una víctima. Siempre hay más. Y eso también lo vemos en ambos casos de la pantalla.

4. Le puede pasar a cualquiera

Nadie está exenta. La exposición mediática no le blinda a nadie. Si bien, se puede seguir una característica de ir tras la más nueva o con menos antigüedad en la empresa, para que el temor o la angustia de no ser escuchada la acalle.

5. El rubro laboral no importa, es el juego de poder

Si bien ambas historias se desarrollan en medios periodísticos, eso no significa que allí suceda más a menudo o el resto de los rubros esté exento. Ambas historias nos invitan a reflexionar sobre los patrones que tienen en común, sobre la dinámica de que el jefe, por estar un escalón más arriba en el organigrama, crea que tiene autoridad para cruzar la línea del respeto y exigir de una mujer lo que sólo se ofrece con consentimiento.

Si somos testigos de acoso laboral o víctimas, el hecho puede denunciarse a la Oficina de Atención y Prevención de la Violencia Laboral, dependiente del Ministerio de Trabajo, en donde brindan asesoría jurídica e indican sobre los procedimientos a seguir. Se puede contactar al 021 490-930, al correo mujertrabajadora@mtess.gov.py o a la sede ubicada en Herrera esquina Paraguarí de 7 a 15 horas.

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