Paris, AFP.
Las acusaciones de violación o agresión sexual contra el actor Gérard Depardieu han acabado por desgarrar al mundo cultural francés, dividido entre los que creen que llegó el momento de destapar los abusos y los que insisten en que hay que dejar a la justicia hacer su trabajo.
Las acusaciones más graves contra Depardieu, de 75 años, se remontan a 2020, pero otras actrices, trabajadoras del cine o el teatro e incluso periodistas (entre ellas la española Ruth Baza, que lo entrevistó en 1995) han aportado nuevos y graves testimonios.
A ello se añade un reportaje televisivo, durante una visita de Depardieu a Corea del Norte en 2018, en la que el actor profiere repetidamente comentarios groseros y machistas ante la cámara.
Fue una carta pública de apoyo al actor la que abrió la caja de truenos: cerca de 60 personalidades del mundo del cine, el arte o la literatura expresaron su admiración por el intérprete de “Cyrano”, al que consideran “probablemente el actor más grande”, en peligro de ser “cancelado”.
La réplica a esa tribuna publicada en el diario Le Figaro fue fulminante: más de 600 personalidades advirtieron que Depardieu “no representa a Francia”. Y a esa carta pública le siguió otra, bajo el título “Adiós al viejo mundo”.