Seis años después del triunfo de “La La Land”, el director de cine francoestadounidense Damien Chazelle vuelve a retratar Hollywood pero ahora en su versión cruda y desmesurada, con “Babylon”, interpretada por Margot Robbie y Brad Pitt. La película se estrena la semana que viene en España y América Latina.
Tiene una duración de 03H09 y describe un Hollywood justo antes de la llegada del cine sonoro, una fábrica de sueños pero también la tumba artística de actores y creadores que no pudieron o supieron adaptarse al cambio. “Babylon” narra los sueños de una aspirante a actriz (Margot Robbie), el desencanto teñido de comicidad de un actor en declive (Brad Pitt) y la suerte del debutante (Diego Calva), un ingenuo que se encuentra inesperadamente detrás de la cámara. El ritmo en la pantalla es desenfrenado, los rodajes son descritos de forma cruda, la vida de los protagonistas es una serie encadenada de excesos, mientras su mundo se desmorona.
“Es a la vez una carta de amor y al mismo tiempo una carta de odio o de crítica a la industria”, explicó Damien Chazelle a la AFP a su paso por París.