“Una sociedad no puede pensarse en términos de futuro sin ocuparse de la agenda central que es la educación”, con esa frase expresada por la ex ministra de Educación Marta Lafuente, en una entrevista televisiva, empieza el libro “La gestión Lafuente”, una obra que logra encapsular el legado de la ex titular del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) por su arduo y determinante objetivo de vida ligado al progreso absoluto de la educación paraguaya.
Así, con un relato desde la perspectiva sociológica y política, Miguel Ángel Verdecchia reconstruye la trayectoria en la función pública de Lafuente y sus aportes para el cambio de las bases del sistema académico del país, empezando por las políticas educativas, yendo al funcionamiento del MEC para fortalecer su institucionalidad hasta terminar en las relaciones con diferentes actores que hacen a la educación paraguaya.
Entre el 2013 y 2016, Lafuente otorgó un particular impulso a la política de mejoramiento de las condiciones y el aseguramiento de la calidad del aprendizaje, donde los programas de calidad educativa y desarrollo infantil temprano constituyeron solo algunos de los enfoques centrales de la ex ministra detallados por Verdecchia.
Como ejemplo del compromiso con el mejoramiento de la educación, que se enmarcaba con una agenda educativa para sentar las bases del desarrollo académico integral, se puede citar una de las tantas iniciativas de Lafuente: las maestras mochileras. El objetivo era que determinadas docentes recorran casa por casa y eduquen a niños que no cuentan con la oportunidad de acudir a la escuela para desarrollar su potencial; con este plan se llegó a 4.000 niños y niñas.
SANEAMIENTO INSTITUCIONAL
En “La gestión Lafuente” se podrá apreciar también la manera en la cual la ex ministra buscaba enmarcar una estructura organizativa del MEC para contar con una institución que responda con competencia, honestidad y eficiencia a los desafíos de políticas educativas inclusivas y equitativas. Para ello, impulsó un saneamiento institucional, donde transparentar la gestión y priorizar la integridad y la competencia fueron elementos cruciales.
De este modo, resulta posible visibilizar y reivindicar a través del relato de Verdecchia una de las principales banderas que Lafuente siempre buscó ondear durante su gestión: la educación como un bien público y como un derecho humano fundamental. Esto a seis meses de la partida de la ex titular de la cartera educativa. Dándole prioridad a ese factor antes que a la idea de crearse una “cintura política”, despartidizando y despolitizando el MEC, Lafuente ofreció una gestión verdaderamente enmarcada en la educación.
Esto, a decir del autor del libro, pudo haber constituido uno de los principales motivos del ostracismo al que fue sometida la ex ministra, dejando inconcluso gran parte de su aporte, pues aún le quedaba mucho por trabajar a favor del sector educativo.