Ayer se recordó el primer aniversario del fallecimiento del cantante y compositor paraguayo Eduardo Rivas (1930-2020), conocido en el ambiente cultural como “La voz romántica del Paraguay” tras destacarse en los escenarios bonaerenses.
Don Eduardo estudió canto y guitarra en Buenos Aires–Argentina, donde logró integrar la Orquesta del Gran Maestro don Mauricio Cardozo Ocampo dando así nacimiento a su carrera como cantante. También tuvo participación en las prestigiosas audiciones radiales de Radio Splendid y El Mundo de Buenos Aires (ARG), donde hacían presentaciones a viva voz con el recordado don Emigdio Ayala Báez.
Tras vivir en el vecino país por muchos años, donde emigró con su familia durante la Revolución de 1947, regreso a Paraguay para realizar grabaciones de discos, presentaciones en las principales radioemisoras e incursionar en el teatro, con exitosas presentaciones de zarzuelas y comedias musicales como “Colegio de contramano”, “Romeo y Julieta”, “La fiesta de las zarzuelas” y “Molinos de viento”.
Compartió escenario Ernesto Báez, Carlos Gómez, Sara Giménez, Betty Figueredo, Kikina Zarza, entre otros grandes del teatro nacional. Tiempo después tuvo su espacio en la televisión con “Noches melódicas”.
Eduardo Rivas grabó más de 100 canciones de las cuales también es autor de obras “Mucho más”, “Qué lindo amor”, “Cuando pienses en mí”, “Viviré pensando en ti”, “Sonríe muchachita” y “A la orilla del mar”.
También es conocido por grabar la polca “Nacional Querido”, por ello la directiva del Club Nacional recientemente le brindó un homenaje por considerarlo uno de sus más insignes símbolos institucionales.
El Congreso Nacional de la República del Paraguay a través de la Honorable Cámara de Diputados, en fecha 9 de mayo del 2013, reconoció a Eduardo Rivas por su destacada trayectoria artística como cantante, compositor y su valioso esfuerzo en la difusión y promoción de la música paraguaya en escenarios nacionales e internacionales.