El pianista italiano Massimo Folliero y la Orquesta Sinfónica de la Policía Nacional subirán al escenario del Teatro Municipal de Asunción “Ignacio A. Pane” (Presidente Franco y Alberdi), el viernes 14 de marzo, a las 19:30, para celebrar el aniversario 130.° del colegio Dante Alighieri. Con un repertorio de temas clásicos italianos, paraguayos e internacionales rendirán tributo a la hermandad entre Italia y Paraguay. Las entradas se reservan sin costo por WhatsApp al 0974 812022.
El Dante Alighieri, fiel a su tradición de promover la educación artística y cultural, celebra un nuevo aniversario con un concierto abierto al público. El maestro Massimo Folliero, amigo de la institución, regresa por segunda vez al país para ofrecer un viaje musical único por Italia, Paraguay y el mundo. Junto a la Orquesta Sinfónica de la Policía Nacional, dirigida por el maestro Óscar Barreto, interpretará un repertorio que abarca desde los himnos nacionales de Paraguay e Italia, hasta obras clásicas y populares.
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“Cada aniversario nos llena de emoción y orgullo. No es fácil sostener una institución educativa por tantos años y nuestra escuela superó muchas situaciones difíciles. Fue cerrada dos veces: una vez a principios de 1900, por cuestiones económicas; y otra, durante la Segunda Guerra Mundial. También la pandemia (de covid) impactó fuertemente, pero aquí estamos, con muchas ganas de crecer en todos los aspectos manteniendo nuestra excelencia educativa”, comentó Viviana Ruggero, presidenta de la Sociedad Dante Alighieri del Paraguay.
La Scuola Italiana Dante Alighieri, fundada el 14 de marzo de 1895, en Asunción, por la Società italiana di Mutuo Soccorso y la Società Femminile di Beneficienza Margherita di Savoia, ha contribuido de manera fundamental a la formación de varias generaciones de paraguayos. Actualmente cuenta con dos sedes: la histórica casa del centro de Asunción, que ha crecido cinco pisos, y un nuevo local en Fernando de la Mora.
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Aconsejan la musicoterapia como herramienta para la salud integral
La licenciada Eliana Todero habló de la musicoterapia como técnica utilizada con fines curativos en el campo de la salud. Aconsejó recurrir a esta herramienta para buscar mejorar la salud integral de los pacientes. “Es básicamente buscar la salud integral de las personas a través de la música como un medio de expresión, como una herramienta, con diferentes formas que va tomando la música en las terapias”, señaló a la 1020 AM.
Dijo que no se trata simplemente de escuchar música erudita. “Es entender la música desde un lugar donde todos hacemos música, donde nuestra forma de hablar tiene un ritmo y una melodía. Y todo eso como una forma de comunicación y expresión se valida y se usa en terapia”, refirió.
Según la especialista este tipo de terapia se recomienda para el tratamiento de varias enfermedades. “Hay diferentes modelos y abordajes tanto desde el ámbito clínico, hospitalario, en el área educativa, prevención, promoción, tratamiento”, subrayó. Así también, se aplica en el área de la rehabilitación en los casos de alteraciones neurológicas. “De hecho la musicoterapia empezó en el campo de la rehabilitación muscular y física de personas que habían quedado con lesiones pos Segunda Guerra Mundial”, recordó.
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Pacientes con daños neurológicos
La musicoterapeuta afirmó que se trabaja también con personas con daños neurológicos, tales como la depresión, el Alzheimer o una demencia, donde hay una alteración. “Y el hecho de que la música haya estado ligada a un momento importante de su vida hace que sea más fácil el acceso a ese recuerdo. Porque hay algo emocional, la música te significa algo a vos y que te signifique algo hace que sea más peso ese recuerdo”, puntualizó.
Todero participó en octubre del 2024 de un ciclo de talleres de Musicoterapia en el Centro de Salud Mental de CESI del Instituto de Previsión Social (IPS), donde enseñó a los pacientes a recurrir a la música para mejorar la salud mental y el bienestar emocional. Los talleres se presentaron con asegurados, como parte del ciclo de terapias expresivas en conmemoración del mes de la salud mental, buscando potenciar los efectos de los tratamientos farmacológicos y psicoterapéuticos.
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Sigue la obra teatral “La isla, territorialización de en alta mar”
La obra teatral “La Isla, territorialización de En alta mar” del escritor polaco Slawomir Mrozek (1930-2013) volvió a escena a pedido del público, en el local de Casa Karakú, ubicado en Montevideo 1025 casi Manduvirá, en Asunción. El actor Víctor Sosa dirige al elenco conformado por Rubén Zapattini, Luis Gutiérrez y Fredy Gonzales, en las funciones previstas hoy y mañana a las 20:30, con entradas a G. 30.000; reservas al 0961603490.
Esta comedia, mezcla de absurdo y reflexión sobre la naturaleza humana, desafía al público con una historia donde la supervivencia y la lucha por el poder se combinan en una atmósfera de comedia y drama absurdo. Tres hombres, Chacho, Fabri y Justino, se encuentran en medio de un Chaco incendiado, atrapados por las circunstancias extremas de un naufragio. Frente a la escasez, deben decidir quién se sacrificará para alimentar al grupo.
Entre discusiones manipuladoras, los personajes enfrentan la crudeza de la jerarquía social, las dinámicas de poder y la explotación de los más débiles. A través de humor negro y un planteo audaz, la obra nos invita a reflexionar sobre los aspectos más oscuros del comportamiento humano en situaciones límite.
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Nelly Jiménez, una de las personalidades más complejas de la música paraguaya del siglo XX
- Fotos: Gentileza/Archivo
Con motivo del Día Internacional de la Mujer, que se conmemoró ayer 8 de marzo, La Nación/Nación Media conversó con dos investigadores de la música paraguaya sobre el enorme aporte que brindó al acervo musical paraguayo la compositora y pianista Nelly Jiménez (1925-2005), una destacada de la música nacional que con el paso del tiempo, a fuerza de trabajo de quienes la admiran y valoran, escribe su nombre en un lugar principal de la historia del arte local.
Si bien el siglo XX fue un periodo de conquista de muchos derechos para las mujeres, estas siguieron padeciendo los prejuicios de género y su importancia fue a menudo soslayada en muchos ámbitos, entre ellos la música.
“Para mí la figura de Nelly representa esperanza. Saber que una mujer de aquel tiempo tuvo el valor de enfrentar preconceptos y romper esquemas establecidos, lo que te da la pauta de que como mujer no hay que dejar de luchar por hacer lo que una ama como artista, de que nuestro trabajo desde el arte es algo maravilloso, que construye páginas de nuestra identidad cultural”, refiere la trombonista y compositora Fátima Abramo.
“Nelly fue una pianista, compositora, pedagoga, maestra de grandes músicos como Lobito Martínez. Fue la primera mujer que compone música académica que registra la historia de la música paraguaya, así como la primera que, avanzando hacia nuevos lenguajes, compone música electroacústica, es decir, de estilo contemporáneo”, explica Manuel Martínez Domínguez, miembro del Centro de Investigación Musical Juan Max Boettner y director del Ateneo Paraguayo, espacio donde la compositora se formó y desarrolló su labor como docente.
A pesar de su relevancia y aporte, aún le es esquivo el reconocimiento como lo fue en vida. Es ante la necesidad de poner de relieve su figura que conversamos con Fátima Abramo (FA) y Manuel Martínez Domínguez (MMD) sobre su vida y aportes.
–¿Qué representó Nelly Jiménez en el marco de la música hecha en Paraguay?
–FA: Considero que Nelly Jiménez fue una figura cuya formación musical aporta un relevante valor para la música de nuestro país, a quien lamentablemente quizás la época de su auge creativo, el contexto social, los prejuicios existentes hacia el trabajo de las mujeres o tal vez su propia personalidad pudieron haber influido en una infravaloración de su genial aporte a nuestra historia musical.
TRANSGRESIÓN
–¿Cuál es la relevancia del trabajo de Nelly tanto como compositora como docente?
–FA: Es de un valor incalculable. En primer lugar, porque muestra antecedentes de una formación de vanguardia tanto en interpretación, composición y labor en la docencia. Pero creo absolutamente fundamental verlo desde el cristal del valor humano, porque con su trabajo nos demostró hasta diría un cierto tipo de transgresión, la intelectual. La intelectualidad, que en ese tiempo tanto fue estigmatizada en la mujer en todo el mundo.
–MMD: En primer término, el hecho de ser mujer que se dedique a la composición. Recordemos que los roles que asumían las mujeres que se dedicaban al piano eran o bien el concierto, o bien la docencia. Nelly abandona el concierto pianístico a mediados de la década de 1960. Si bien sus composiciones clásicas están en la línea del neorromanticismo paraguayo para piano, donde destacan Moreno González y Boettner, es la única compositora de música electroacústica que el Paraguay conoce en la década de 1970. Salvo una grabación de “El guajhú”, su obra todavía está inédita. Es la primera que escribe en graphic scores, es decir, abandona el pentagrama para luego optar por el único registro musical que puede soportar su obra: la grabación. De este modo, la grabación es el registro.
–¿En qué aspectos fue pionera?
–MMD: Fue la primera en componer música académica. Otras mujeres, antes que ella, se han dedicado a la docencia, a la interpretación, o bien a la escritura de letras de música popular. Su etapa compositiva tiene dos épocas: la clásica y la contemporánea. De la primera son su “Misa en si” y su “Sonata en fa”; de la segunda, por ejemplo, es “El guajhú”, basado en el texto de su amigo el escritor Gabriel Casaccia Bibolini. Por influencia del musicólogo brasileño Heitor Alimonda, que dictó cátedra en el Ateneo Paraguayo en 1965, Nelly fue la primera en hacer lo que hoy genéricamente se denomina “música antigua”, es decir, ensambles de música medieval, renacentista y barroca. De hecho, dirigió la primera agrupación de música antigua: el Ensamble Asunceno de Música Antigua en la década de 1970. Fue la primera en brindar un concierto de flauta dulce en el Ateneo, a fines de la década de 1960.
ROMPER PARADIGMAS
–¿Qué se sabe de sus obras?
–FA: Como músico de orquesta, aún veo que sus obras y las de varios compositores compatriotas no son exploradas a profundidad en nuestro medio. Afortunadamente, estamos en tiempos más generosos con la historia y con el acceso a la información, creo que eso ayuda enormemente a cambiar el juego e ir rompiendo paradigmas para ir descubriendo cosas geniales, entre ellas el trabajo de Jiménez.
–¿Con qué materiales se cuenta respecto a sus obras?
–MMD: Gracias a la generosidad de sus familiares, en el Ateneo se encuentra todo archivo personal. Junto con las colecciones de Juan Max Boettner, Juan Carlos Moreno González, Víctor Recalde, Narciso R. Colmán (padre e hijo), el fondo de Nelly Jiménez es uno de los más completos e importantes para la historia de la música paraguaya por la gran cantidad y calidad de materiales, que van desde su ingente correspondencia, notas, recortes periodísticos, libros, revistas, partituras de otros compositores, sus originales manuscritos, sus graphic scores, sus cintas, grabaciones, así como instrumentos (cítara) y objetos personales, que hablan de la producción artística de una de las personalidades más interesantes de la música paraguaya.
–¿Qué se podría decir de su labor pedagógica en la música?
–MMD: Conoció en Chile la educación musical en la década de 1960 por la misma época que Ercilia de Talavera. En este sentido, Nelly conservó el esquema liberal burgués de la enseñanza de la música, es decir, en el ámbito privado, la práctica musical vista como adorno o placer de ocio, reducido solo a miembros selectos de la élite asuncena a la que se vinculaba por relaciones de amistad. Nelly no formó profesores de música, sino artistas como Lobito Martínez o profesoras de piano, como María Elena Buongermini. Por otro lado, la pedagogía de Nelly se redujo a la sistematización de los métodos de enseñanza que ella ya conocía de su época de estudiante en el Ateneo, y no se observa en sus libros y materiales la aplicación de recursos propuestos por métodos como Kodaly, Martenot, Orff o Dalcroze.
EXCEPCIONALIDAD
–¿Como mujer fue una excepción en su tiempo o existen otras figuras por conocer?
–FA: Absolutamente. Su presencia fue una de las pocas y gratas excepciones para nuestra historia. Hace unos días estuve recabando información sobre otra mujer que ha dejado varias obras compuestas y hasta editadas para piano. Estamos desde la Casa Bicentenario de la Música recabando más datos sobre esta compositora, que esperamos dar a conocer en la brevedad, lo que nos hace comprender que nuestro país tiene muchísimas cosas gratas por descubrir en rincones desconocidos por explorar. Al contrario de lo que muchas veces podemos pensar, arrastrados por los vestigios de una época en la que el arte se consideraba una actividad subversiva.
–MMD: Como compositora, podemos afirmar que fue la excepción, ya que en ese aspecto se aleja, aunque no lo abandona, del tradicional rol femenino de “reproducción” de la mujer paraguaya que hace música: interpretación y docencia. Por otro lado, se debe tener en cuenta aquel axioma que reza que “la ausencia de evidencia no es evidencia de ausencia”. El hecho de que hasta ahora no aparezcan composiciones de otra mujer no significa que no haya habido.
–¿Se podría decir que Nelly es una figura que falta ser puesta en valor?
–MMD: La figura de Nelly Jimenez es una figura por explorar, comprender e interpretar, tanto a nivel biográfico como por su obra misma. La complejidad de los graphics scores, que solo ella entendía por tratarse de un tipo de escritura subjetivo y personal, el hecho de no dejar discípulos en el campo de la música contemporánea, entre otras cuestiones, dificultan el trabajo acerca de su producción musical.
–¿Su trabajo fue reconocido en su época?
–MMD: Recordemos que Nelly Jiménez, si bien era una figura musical conocida desde la década de 1940, tanto por su talento como por su connotación social, no figura en el libro “Música y músicos del Paraguay “, publicado por Juan Max Boettner en 1956. Al ser invisibilizada en el libro de Boettner, que constituye el canon de la historia musical del Paraguay, quienes hacen historia de la música no encuentran referencias acerca de ella. Existen algunos diccionarios con datos inexactos que no dan cuenta del alcance y la magnitud de esta compositora.
INVESTIGACIONES
–¿Cuáles son algunos de esos trabajos?
–MMD: Los trabajos de las guitarristas Micaela Núñez y Salma Gómez, además de la labor investigativa que hasta la fecha realiza la Prof. Natalia Funes, constituyen los referentes más autorizados, hasta la fecha, con que se cuenta acerca de la vida y obra de Nelly Jiménez. Estos trabajos constituyen el estado de la cuestión por donde se debe empezar cualquier investigación sobre la compositora. De allí que se anima a los jóvenes a investigar, además de su obra, mundos como su correspondencia recibida, su correspondencia remitida, sus cuadernos de viaje, sus cuadernos de notas, su fotografías, su faceta como ceramista, su faceta como dibujante, su faceta como diseñadora, sus diapositivas, sus cintas, sus catálogos. En fin, otros aspectos que trascienden lo meramente musical y se dirigen a aspectos más específicos que pudieran darnos la pista acerca de una de las personalidades más complejas de la música paraguaya del siglo XX.
–¿Qué otras figuras quedan por reconocer en cuanto a su aporte?
–FA: Existen figuras que contribuyeron a la construcción de nuestra historia como, por ejemplo, Susana Elizeche de Codas, quien ayudó al proceso creativo de la guarania junto a José Asunción Flores. Fue considerada una niña prodigio en la música. También los indicios de la existencia de tres compositoras que datan aproximadamente de 1920, una de ellas llamada Emilia Troche, que fue compositora con obras editadas inclusive.
–¿Qué labores están realizando para la divulgación de este aporte?
–FA: Nos encontramos en proceso de investigación en la Casa de la Música gracias a los registros que gentilmente concede la familia de Manuel Viladesau. Pronto estaremos divulgando dicha información a la comunidad. Aparte de los antecedentes que podemos tener, creo que también merecen ser reconocidas las protagonistas de la actualidad. Es un trabajo muy significativo.
MENSAJE
–¿Qué reflexión final harías respecto al Día Internacional de la Mujer en el ámbito de la música?
–FA: Además de merecer ampliamente el reconocimiento del trabajo de las compositoras paraguayas académicas y populares, también merece ser reconocido el trabajo de muchas mujeres maestras que actualmente se dedican a formar artistas; las colegas que abrazaron la vocación de ser intérpretes, en cualquiera de sus expresiones, ya sea en una orquesta, en una banda o como solista. El trabajo de la mujer en la música muestra una absoluta sensibilidad e intelectualidad en todos sus ámbitos, que fue apagado por mucho tiempo. El reconocimiento de hoy en día ya no debe ser solo por ser mujer y dejar un pequeño aporte para llenar espacios obligatorios. Más bien porque nuestro trabajo hoy en día tiene absoluta solidez, intelectualidad y profesionalismo, y eso es una muestra de la evolución que vamos teniendo paso a paso como sociedad.
PERFIL
MANUEL MARTÍNEZ DOMÍNGUEZ
(Asunción - 1977) es profesor superior en Educación Musical y licenciado en Historia por la Universidad Nacional de Asunción. Además, es gestor cultural, autor de ensayos y escritos en el campo de la educación y las artes.
PERFIL
FÁTIMA ABRAMO
(Asunción - 1985) es trombón principal y compositora residente de la Orquesta Sinfónica del Congreso Nacional del Paraguay. Es licenciada en Educación Musical y máster en Gerencia y Administración de Políticas Culturales y Educativas. Actualmente cursa el último semestre de la maestría en Musicología en la Universidad Nacional de las Artes de Buenos Aires, Argentina.
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Música para dos grandes maestros en el Municipal
El próximo miércoles 12 de marzo, a partir de las 20:00, en el Teatro Municipal Ignacio A. Pane (Pdte. Franco entre Chile y Alberdi), la Orquesta de Cámara Municipal de Asunción (OCMA) ofrecerá un concierto homenaje a dos grandes figuras de la música paraguaya: el maestro Florentín Giménez y a don Ángel Echeverría.
La orquesta se presentará bajo la dirección del maestro Miguel Ángel Echeverría, y contará con la participación de especial de los artistas invitados como Luz María Bobadilla (guitarra), Ada Antúnez (cantante), Érika Estigarribia (cantante), Jorge Servián (cantante) y José Miguel Echeverría (violín). Además, se sumarán los acordeonistas José Félix (Neneco) Orrego, Alejandro Ríos, Martín González, Juan Ramón González, Félix de Valois Franco, Tomás Gavilán, Gustavo Barrios, Carlos Villalba.
Giménez es uno de los referentes más importantes de la música paraguaya, tanto en su aporte relacionado con sus obras, su labor académica, así como su gestión para la creación del Conamu y la OSN.