La película paraguaya “Los últimos”, de Sebastián Peña Escobar, se estrenará en cines nacionales el jueves 5 de setiembre, luego de cumplir un exitoso circuito internacional que inició en noviembre de 2023 con su debut mundial en el Festival Internacional de Documentales de Ámsterdam (IDFA), de los Países Bajos. El documental, de 89 minutos de duración, marca el debut en dirección del productor de otros logros de la cinematografía nacional, como “Guaraní” y “Las herederas”.
Sebastián Peña Escobar también es el autor del guion, participa ante cámaras junto a Ulf Dreschel y Jorge Escobar; así como integra del equipo de productores con Marcelo Martinessi, Agustina Chiarino, Fernando Epstein, Xavier Rocher, Marina Perales Marhuenda, por La Babosa Cine (Paraguay), Mutante Cine (Uruguay) y La Fábrica Nocturna Cinéma (Francia). “Los últimos” se exhibió, y recibió distinciones, en festivales de Punta del Este (Uruguay), Guadalajara (México), Italia, Malta, entre otros, y en setiembre se mostrará en Florianópolis (Brasil).
El largomentraje presenta a Ulf, un alemán de lengua ácida, es un especialista en mariposas de renombre internacional. Jota, un ingenioso paraguayo considerado el mayor experto en aves del país. Durante décadas, este extraño dúo ha estado estudiando los bosques de Paraguay mientras presenciaba la incesante deforestación y los incendios forestales causados por los ganaderos. A ellos se suma el director Sebastián Peña, otro apasionado de ese ecosistema de bosque seco en peligro de extinción llamado Chaco, la masa verde más grande de América del Sur después de la selva amazónica. Los tres integran la pequeña tribu de viajeros que durante más de quince años realizaron innumerables expediciones juntos.
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Enorme incendio forestal
En 2019, tras escuchar un rumor sobre una deforestación masiva en Chovoreca, una de las pocas zonas vírgenes que quedan en el Chaco, el equipo decidió ir a investigar, cámara en mano. Un viaje por carretera de dos días los llevó al noroeste del país, cerca de la frontera con Bolivia. Atravesaron un paisaje árido, por pueblos silenciosos, grandes territorios ganaderos y bosques solitarios, interrogándose sobre la naturaleza del comportamiento humano, las consecuencias de la deforestación, la realidad del cambio climático y el futuro más probable de la problemática especie humana.
Ulf y Jota, poseedores de conocimientos portentosos y diversos desde biología y antropología, hasta historia y filosofía, responden con una racionalidad sarcástica que parece llegar a conclusiones fatales. En Chovoreca descubren que un enorme incendio forestal se está extendiendo por la región, destruyendo todo a su paso. Instalan campamento, esperan el momento oportuno para acercarse a los bosques vírgenes, y mientras el tiempo pasa aprovechan para filmar esos bosques, como si fuera una forma de mantenerlos vivos. Ese material constituye el nudo de esta película.
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Obsesión por los bosques
El director Peña lo ha explicado así: “Un día conocí a Ulf y Jota, y durante los siguientes 15 años viajamos a tantas reservas forestales que, con el tiempo, lo sentí como un largo viaje circular. Inmediatamente noté que compartíamos una atracción por los bosques, pero también que ellos expresaban su amor por la naturaleza de una manera muy curiosa. Parecen haber internalizado el hecho de que los bosques eventualmente se extinguirán, y que este era un resultado inevitable porque era el resultado del patrón de comportamiento de nuestra especie. Entonces, aunque a menudo no pueden evitar quejarse y amargarse por esta situación, la mayoría de las veces simplemente se burlan de los humanos y se ríen”.
“En algún momento me convertí en cineasta y sentí la necesidad de contar su historia. Sin embargo, cuando comencé a filmar y comencé a pensar en la película, me di cuenta de que no se trataba sólo de ellos sino también de mi propia obsesión por los bosques. ¿Cómo puede desaparecer algo que cubre inmensas áreas del planeta? Y más aún, ¿cuál es la raíz de este extraño comportamiento de nuestra especie hacia ellos? ¿Es este un rasgo biológico o cultural de nuestra especie? ¿O tal vez ambos?”, agregó.
Paraguay tiene uno de los peores registros de deforestación del mundo. Además de la deforestación directa, la mayor amenaza para sus bosques son los incendios forestales provocados como resultado de la “temporada de quemas”, época del año en la que muchos ganaderos, y gente en general, comienzan a quemar pasto, hojas secas y basura. En realidad, esto sucede durante todo el año, pero más entre julio y octubre, también conocidos como los “meses blancos”, porque el cielo está literalmente blanco debido al humo de todos los incendios. Si las cosas siguen así, el Chaco probablemente desaparecerá en aproximadamente una década, y la pérdida del hábitat natural también significa la pérdida del ámbito sociocultural. Hay decenas de grupos indígenas en peligro de extinción con diversas lenguas y cosmogonías aún vivos en el Chaco. Esta película es un llamado de advertencia.
Sobre el director
Nacido en Asunción, en 1973, Sebastián Peña Escobar estudió Economía y Empresariales en Paraguay, Estados Unidos e Italia. Desde 2002 ha desarrollado y producido revistas, libros y películas. Ha publicado ensayos sobre Teoría e Historia de la Cultura, así como prosa, poesía, artículos de opinión. Su filmografía como coproductor: en 2015, el largometraje “Guaraní”, dirigido por Luís Zorraquín, que formó parte de la Selección Oficial del Tallinn Black Nights y, ese mismo año, el documental “Chicas nuevas 24 horas”, dirigido por Mabel Lozano, que estuvo nominado a mejor documental en los Goya. Además, como productor principal en 2018, el largometraje “Las herederas”, dirigido por Marcelo Martinessi, que participa en la Berlinale, consiguiendo dos Oso de Plata, el premio Alfred Bauer y a mejor actriz.