Por David Sánchez, Irapuato (México), X: @tegustamuchoelc (*)

Hemos tenido el placer de entrevistar a Emilio Portes, un director de cine que ha sabido conjugar el terror con la comedia negra, creando un estilo propio dentro del cine mexicano. Emilio Portes define su cine como una mezcla de comedia y terror, inspirado por grandes referentes como Álex de la Iglesia.

“Hago películas que tienen esta mezcla de comedia y terror o que a lo mejor están sustentadas en el género, pero eso no las exime de tener grandes dosis de humor muy negro”, explica el cineasta. Esta combinación ha permitido que sus películas no solo asusten, sino también diviertan, ofreciendo una experiencia única al espectador.

Hablando de sus experiencias internacionales, Portes recuerda con especial cariño su paso por el Festival de Sitges en España: “Fue un sueño cumplido... los cines que tienen ahí en Sitges son preciosos”. La oportunidad de presentar su trabajo en uno de los festivales de cine fantástico más importantes del mundo, es un hito significativo en su carrera.

El cine de terror mexicano ha tenido una recepción variada fuera del país. Portes menciona a Guillermo del Toro (“El laberinto del fauno”) como el máximo exponente actual del género, mientras que una nueva generación de directores, como Isaac Ezban (“Los parecidos”) y Lex Ortega (“México bárbaro”), están emergiendo con fuerza. “En México, el cine de terror siempre ha tenido sus fans, pero los problemas de exhibición y distribución lo han dificultado”, comenta. Sin embargo, el panorama está cambiando, y poco a poco el cine de terror mexicano está encontrando su espacio tanto en México como en el extranjero.

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El Festival Mórbido, fundado por Pablo Guisa, y el Festival Macabro son dos de los eventos más importantes para el cine de terror en México. “Mórbido es uno de los festivales más importantes, pero el festival más viejo que se ha consolidado es Macabro”, señala Portes. Estos festivales, junto con otros más recientes como Feratum, están ayudando a consolidar la escena del cine de terror en México.

Para Portes, el Festival Internacional de Cine Guanajuato (GIFF) es uno de los festivales más importantes de México, junto con los de Guadalajara, Monterrey y Morelia. “Guanajuato siempre ha estado presente, y ahora, postpandemia, habla de una resistencia tremenda y de un amor al cine”, afirma. La capacidad del GIFF para adaptarse y seguir ofreciendo un espacio para el cine, incluso en tiempos difíciles, es un testimonio de su importancia y relevancia.

El director también reflexiona sobre el futuro del cine y los cambios en la industria: “Digo como broma, que la película que voy a pasar aquí (‘El precio de educarlos’, con Joaquín Cosio), que va a ser la de clausura, será la única vez que se exhiba en público”. Esta declaración, aunque en tono jocoso, refleja una realidad sobre el estado actual de la exhibición cinematográfica y los retos que enfrenta. A pesar de estos desafíos, Portes sigue comprometido con su trabajo y con la esperanza de que sus películas encuentren su público.

Con su estilo único y su pasión por el cine, Emilio Portes sigue siendo una figura clave en el panorama del cine de terror mexicano, llevando sus historias de humor negro y horror a audiencias de todo el mundo.

* David Sánchez es un periodista franco español afincado en Toulouse, centrado especialmente en cine iberoamericano, miembro de la crítica internacional Fipresci. Sitio: https://www.tegustamuchoelcine.com.

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