La Embajada del Brasil en Paraguay, a través del Instituto Guimarães Rosa (IGR), rinde un homenaje a la memoria de Bartomeu Melià con la muestra “Álbum amazónico. Bartomeu Melià en el Mato Grosso”, que se inaugura este viernes 2 de junio, a las 19:00, en su sede de Eligio Ayala casi Perú, en Asunción; y permanecerá habilitada hasta el mes de agosto.
Este proyecto curatorial de la crítica de arte y escritora Adriana Almada se trata de una selección de fotografías inéditas del padre Melià, que serán desplegadas en la Sala Livio Abramo, y un video documental realizado por Arapy Yegros, que será proyectado en el Teatro Tom Jobim. Ambos dan testimonio de la convivencia del sacerdote con el pueblo indígena Enawene-Nawe, en Brasil, entre 1978 y 1981. Puede visitarse, con acceso libre y gratuito, de lunes a viernes, en el horario de 17:00 a 20:00.
Bartomeu Melià, sacerdote jesuita nacido en Mallorca en 1932 y fallecido en Asunción en 2019, fue una de las mayores figuras del campo cultural en Paraguay. Dejó un aporte inconmensurable a los estudios de la región guaranítica de América del Sur, en disciplinas como la lingüística, la historia, la etno-historia, la antropología y la etnología.
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Los “diarios amazónicos”
En la década de los años 70, junto a otros colegas antropólogos, Bartomeu Melià denunció por múltiples vías el genocidio aché, episodio de triste memoria en la historia reciente del Paraguay. Eso motivó que fuera expulsado del país en 1976 por el régimen de Stroessner. No regresaría hasta después de la caída de la dictadura, que ocurrió en febrero de 1989.
¿Dónde pasó Melià sus años de exilio? Estando en São Paulo en un congreso, recibió la invitación de un amigo para ir junto al jesuita Vicente Cañas, quien hacía tres años había establecido una misión pastoral en las cercanías del río Juruena, al oeste del estado de Mato Grosso. Poco después, Melià se adentraba en la selva, entre los indígenas entonces conocidos como “Salumã”, que habían sido contactados en 1974 y que años más tarde recuperaron su denominación de origen, Enawene Nawe, expresión que significa “hombres auténticos” en arawak.
Durante los tres años que Melià convivió con ellos, recogió sus mitos, rituales y costumbres en fotografías en blanco y negro que ordenó y guardó cuidadosamente en un álbum, que es el centro de esta exposición. Asimismo, puso su experiencia en varios cuadernos (sus “diarios amazónicos”), en los cuales la narración se veía enriquecida con gráficos y dibujos.
Las imágenes incluidas en esta muestra del Instituto Guimarães Rosa están entre las primeras fotografías que existen de los Enawene-Nawe, a quienes Melià conoció cuando eran un pueblo de solo 130 personas. El padre Vicente, el primero en contactarlos, también los había fotografiado, pero sus copias desaparecieron probablemente en el mismo momento en que fue asesinado, en 1987, tras luchar incansablemente por la reivindicación de los derechos indígenas al territorio.
Melià capturó en esas imágenes tempranas la vida cotidiana de la comunidad y los grandes rituales anuales, uno de ellos de siete meses de duración, llamado Yaokwa o “Fiesta de los espíritus”, durante el cual los Enawene Nawe cantan, bailan e intercambian sal, miel, peces, mandioca y otros alimentos. Muchos años después, las cámaras profesionales de la BBC, Survival International y National Geographic, entre otras grandes plataformas mediáticas, llegarían atraídas por la espectacularidad de las ceremonias, que luego integraron la Lista de la Unesco del Patrimonio Cultural Inmaterial que requiere medidas urgentes de salvaguardia.