Chloe Zhao, la cineasta nacida en Pekín y cuyas películas independientes narran la vida en el corazón de Estados Unidos, se convirtió este domingo pasado en la segunda mujer en ganar un Óscar a la mejor dirección.
La realizadora de 39 años cautivó a los votantes de la Academia con su tercer film “Nomadland”, un drama de ficción que bordea lo documental sobre la comunidad invisible de estadounidenses mayores que viven en casas rodantes y consideran que la carretera es su hogar.
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Después del premio a la dirección de Kathryn Bigelow en 2010 por “The Hurt Locker”, Zhao es la segunda mujer ganadora en los 93 años de historia de los premios Óscar. “Esto es para cualquiera que tenga la fe y el valor de aferrarse a la bondad en su interior. Y aferrarse a la bondad de los demás”, declaró al recibir el premio a la mejor dirección.
Nacida como Zhao Ting e hija de un rico ejecutivo de una empresa siderúrgica china, la directora dejó el país cuando era adolescente para asistir a un internado británico, y terminó su formación en Los Ángeles y Nueva York. Pero Zhao pronto se enamoró de los amplios y salvajes entornos rurales de su patria adoptiva, Estados Unidos: “Nomadland” es solo su último homenaje a los espectaculares paisajes de estados escasamente poblados, de “paso”, como Dakota del Sur y Nebraska.
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Zhao se topó con imágenes de la nación indígena Lakota por casualidad mientras estaba en la escuela de cine de Nueva York. Y sintiéndose desconectada en el extranjero a sus veintitantos años, decidió que no podía hacer una historia mejor sobre la Gran Manzana que “las que ya se han contado”, y decidió “ir al oeste”.
Su primera película “Songs My Brothers Taught Me”, sobre una adolescente que sueña con una vida más allá de la reserva de Pine Ridge, la obligó a pasar meses inmersa en la remota región indígena del medio oeste. La película ganó premios en festivales, pero el gran avance de Zhao llegó dos años después con “The Rider”, otro film cercano al género Western rodado en Pine Ridge y el Parque Nacional Badlands.
El mundo de la “periferia”
En ambas películas, Zhao eligió a personas ajenas a la actuación para interpretar versiones semificticias de sí mismos, un proceso que, según ella, comenzó por necesidad como directora desconocida pero que la ayudó a “construir el mundo en el que estaba entrando”.
“The Rider” fue concebida después de que Zhao conociera a un vaquero que, pese a una grave lesión, se negaba a abandonar el rodeo. Se trata de Brady Jandreau, quien interpreta a Brady Blackburn. “A menudo necesito su ayuda (...) A menudo voy a la periferia de la sociedad y no conozco esos lugares lo suficiente”, dijo Zhao recientemente.
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En “Nomadland”, basada en el libro de no ficción de Jessica Bruder sobre estadounidenses que viven en viejas camionetas tras ser expulsados del sistema por la Gran Recesión, muchos personajes también se interpretaron a sí mismos. Pero Zhao también dirigió a su primera superestrella: Frances McDormand, nominada al premio a mejor actriz.
Esa experiencia puede haber resultado útil para su próxima película, un éxito de taquilla con un megapresupuesto ambientado dentro de la seriede películas de superhéroes de Marvel. “El salto desde el presupuesto de ‘The Rider’ a ‘Nomadland’ se siente como el salto desde ‘Nomadland’ a ‘Eternals’”, dijo Zhao en referencia a la película protagonizada por Angelina Jolie y Salma Hayek, que se estrenará a finales de este año.
“Angustia adolescente”
Clave para el éxito de “Eternals” será el desempeño en China, la patria ancestral de Zhao, donde “Avengers: Endgame”, título anterior de la serie de Marvel, recaudó una suma impresionante de 630 millones de dólares. Pero la reputación de Zhao en China es complicada, ya que luego de que los medios estatales inicialmente la llamaran “el orgullo de China”, los nacionalistas reflotaron viejas entrevistas en las que parecía criticar y distanciarse del país.
Zhao no ha abordado la controversia directamente, pero recientemente dijo que pasarían “algunos años más” antes de que se atreviera a abordar las raíces de su infancia en la pantalla. “Siento que tendría que pensar en la angustia adolescente y todo eso, y volver a casa”, dijo. “Me llevará unos años más. Creo que necesito madurar más, para no tener miedo de mirarme a mí misma”.
Por ahora, vive en la zona rural y algo hippie de Ojai, California, con su esposo, un director de fotografía británico, y dos perros. Y en otra señal de que puede estar dejando definitivamente atrás sus raíces independientes, el próximo proyecto de Zhao después de “Eternals” será una versión occidental de ciencia ficción futurista de “Drácula”.
Fuente: AFP.