Una de las series más comentadas del último fin de semana no fue una producción de Netflix, sino de Amazon Prime Video: “El presidente”, que el viernes pasado estrenó 8 capítulos y se basa en el caso de corrupción en la FIFA del 2015, que se mediatizó como FIFAgate.
Al día siguiente del lanzamiento, la abogada Elba Marcovecchio dijo en Radio 10 de Argentina que la familia del ex presidente de la AFA (Asociación del Fútbol Argentino) y vicepresidente de la FIFA (Federación Internacional de Fútbol Asociación), Julio Humberto Grondona (1931-2014), iniciaría una demanda millonaria contra Amazon por el uso no autorizado de imagen del dirigente argentino y que supuestamente se asocia a hechos de corrupción.
Sin embargo, los dos hijos de Grondona, Liliana Nélida y Julio Ricardo, no confirmaron la demanda, en un duro comunicado contra la plataforma.
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Con “Voy gritando” de fondo, de Luis Alberto del Paraná (1926-1974) –y otras canciones del artista paraguayo–, arranca la serie chilena “El presidente”, protagonizada por el colombiano Andrés Parra (interpretó a Pablo Escobar en la serie “El patrón del mal”), creada por el argentino Armando Bo (ganador del Oscar como guionista de “Birdman”), sigue la historia de Sergio Jadue, un dirigente de un humilde club en Chile, que asciende en el poder dentro de la FIFA y se convertirá en la llave del FBI para desbaratar el mayor esquema de corrupción del deporte mundial.
Carta de los hijos
El comunicado de los Grondona manifiesta: Ante el estreno el día 05/06/2020 de la serie “El presidente”, Liliana Nélida Grondona y Julio Ricardo Grondona, hijos de Julio Humberto Grondona, manifestamos nuestro dolor y repudio con la utilización del nombre, caracterización y datos de la vida privada de nuestro padre, así como con la falsa imputación de actos que afectan su dignidad, buen nombre y honor. La satirización a la que el filme apela, que lo pone como principal hacedor de un esquema de corrupción, encubre un repugnante acto de cobardía, aprovechando el hecho de su fallecimiento para negarle su posibilidad de defensa. Ahora, es mucho más fácil atacar su figura, tergiversando la realidad de los hechos. Don Julio, como se lo conocía, sí fue un hacedor, pero del fútbol local, sudamericano y mundial. Sin su participación, el peso de la Argentina y de Sudamérica, en su conjunto, en este deporte, nunca hubiera tenido la relevancia que adquirió. Por lo demás, participó activa y decididamente en la inserción y desarrollo del fútbol a nivel mundial, de una manera como nunca antes se había pensado. Contribuyó a que el sentimiento futbolístico, sobre todo respecto del seleccionado nacional, ingrese a todas las casas; fomentó el desarrollo de pequeños clubes que ni en sueños hubieran visualizado su participación en un primer nivel; colaboró con que jugadores ignotos, salidos del interior, alcanzaran la categoría de ídolos mundiales. Fue indiscutido por sus pares y respetado por Papas, Gobernantes y personalidades de todas las áreas, tanto nacionales como internacionales. Tuvo críticas, detractores y se contaron historias, que siempre enfrentó y aclaró, cara a cara, defendiendo su dignidad sin nunca rehuir jamás al debate. Nunca estuvo involucrado en una causa judicial por algún delito que pusiera en duda su honestidad.
Entonces, cuando solapados bajo una cámara, amparados por una abusiva y desnaturalizada libertad de expresión y movidos exclusivamente por un afán exclusivamente económico, pretenden ensuciar su memoria, no hablan de don Julio, hablan de ellos mismos. Fue un trabajador incansable, desde su pequeña ferretería hasta el fin de sus días. Fue un padre ejemplar, siempre atento a sus hijos y sus nietos; de esos de “antes”, difícil de encontrar en los tiempos que corren. Eternamente enamorado de Nélida, su esposa, compañera y pilar fundamental de toda su vida. Un amigo entrañable, del que se recibía todo cuando se necesitaba algo. Se fue de esta vida trabajando, de pie, en lo que era su obra y pasión: el fútbol. Miles lo lloraron y miles lo recuerdan. Está presente en cada estadio y en cada cancha de barrio, como su Club Arsenal de Sarandí, emblema de la superación social y deportiva. Su memoria y trayectoria no se ensucian por una película que “mal-informa” conscientemente para obtener un mezquino rédito económico, que apela a la bajeza de mentir un relato; por personas que solamente buscan beneficios personales sin importarles las demás personas; que no conoce la historia ni menos tienen elementos para justificar sus falsos dichos, sostenidos solo por la impunidad que la irresponsabilidad les otorga; ni por empresas extranjeras a las que nada importa el sentimiento argentino, pero que siempre encuentran traidores para ensuciar nuestra identidad. Don Julio murió limpio y tiene su lugar en la Historia.
Finalmente, aclaramos que no somos representados por ningún abogado mediático ni tenemos intención de que el caso, tan caro a nuestros sentimientos, tenga una definición televisiva. Resguardamos el dolor para nuestra intimidad; las ofensas para nuestra paz espiritual y la defensa de nuestros derechos para la justicia, que es el ámbito donde deben dirimirse estas cuestiones.
Como vos decías papá: “Todo pasa”. La fama fugaz, malintencionada, dura segundos. La historia, más eterna, nos pertenece. Y nadie puede arrebatárnosla.
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¿Qué opinaron sobre la serie?
La mayoría de los internautas paraguayos ponderaron, en Twitter, sobre todo por la emoción de encontrar la música de Luis Alberto del Paraná en la banda sonora de “El presidente”. El creador de la serie es hijo de María Teresa Machinandiarena y del actor Víctor Bó, así como nieto del reconocido cineasta Armando Bó (1914-1981), que tuviera una gran amistad con Paraná. De hecho, el artista oriundo de Altos (Cordillera) aparece con actuaciones en el clásico “La burrerita de Ypacaraí” (1962); y sus canciones suenan en “La mujer del zapatero” (1965), “Embrujada” (1969) y “Éxtasis tropical” (1969), dirigidas también por Bó, el abuelo paterno.
- “Muy buena la serie ‘El Presidente’ parodiando sucesos del FIFAgate, en el cual Paraguay es epicentro de corrupción de la Conmebol. Hasta reproducen músicas de Luis Alberto del Paraná. Recomendada” (@DiegoAlarconL).
- “Acabo de ver el primer capítulo de EL PRESIDENTE. Músicas de Luis Alberto del Paraná. Paraguay con una triste imagen. Y los de la CONMEBOL de la época, Gavilla de delincuentes. Por lo visto” (@Michel_carba).
- “Sí señor, correcto, yo también esperaba más como que me dejó a medias jejeje pero lo bueno fue la música paraguaya de Luis Alberto del Paraná” (@SanRet1).
- “Vi dos capítulos. Está buena y me gustó mucho cómo utilizan la música de Luis Alberto del Paraná en las diferentes escenas. La representación de Paraguay está muy floja...” (@Maripilipy).
- “Entre toda la trama, sublime las músicas de Luis Alberto del Paraná” (@lupe_cc).
- “Empezando a ver la serie #ElPresidente por @PrimeVideoLat y que orgullo escuchar al gran Luis Alberto del Paraná!!! Parece que va ser el único #Paraguayo que me va poner orgulloso en la Serie.... #esonomas” (@JacintoERuiz).
- "Lo más interesante hasta ahora de la serie “El Presidente” son las canciones de Luis Alberto del Paraná. Escuchar “Bori Bori” una de sus primeras letras grabadas (con “Serenata a Ruperta”) es para emocionarse!" (@walterharms_py).
- “Tiene un lindo vértigo la serie, entretiene bien. También hay muy buenas actuaciones. Parra cumple (es verdad la “cercanía” a un personaje de los hermanos Coen), a Margani como don Julio lo amo. Y hay mucho Luis Alberto del Paraná, tributo de Bó nieto a Bó abuelo” (@HaffnerSoy).