Los Angeles, Estados Unidos | AFP, por Javier TOVAR.
De Carlos Santana a Camila Cabello, pasando por Luis Fonsi, Ricky Martin, Jennifer López, Enrique Iglesias, John Legend, Barbra Streisand... y pare de contar. Todos tienen algo en común: Claudia Brant.
La compositora argentina de 50 años ha escrito con y para infinidad de artistas conocidos por sus éxitos. Por ejemplo, está detrás de "No me doy por vencido" de Fonsi, nombrada por la revista Billboard como la canción de la década, tras haber estado en el primer lugar de las listas latinas por un récord de 19 semanas consecutivas.
“Tengo más de 1.000 canciones grabadas en todos los géneros, en todo el planeta... Siempre hay algo, en algún lugar, donde yo metí la cuchara y eso me da alegría”, dijo a la AFP Brant, que volvió al estudio para grabar su propia producción, “Sincera”, postulada al Grammy a mejor álbum pop latino.
Ha sido nominada a cinco Grammys Latinos, de los que ganó uno por canción del año en 2009 con "Aquí estoy yo", que escribió con Fonsi y Gen Reuben.
“Uno tiene que ser auténtico”
El micrófono no le es ajeno a Brant, que con "Sincera" suma seis discos de estudio. Pero es como compositora donde ha cosechado más éxitos: desde que se mudó en 1998 a California suma un promedio de 40 canciones grabadas al año.
"Me encanta componer, adoro mi trabajo, me encanta componer para otra gente y componer para mí, son cosas diferentes, las disfruto las dos", indicó.
"La diferencia está en que cuando estoy escribiendo con o para otra persona tengo que atenerme a lo que ellos están buscando, al tipo de canción que necesitan para su álbum, conmigo tengo la libertad de hacer lo que me da la gana", siguió.
Y fue bajo esa premisa que trabajó este disco, con sinceridad, haciéndole honor al título.
"El disco es bastante ecléctico, tiene un poco de todo", indicó. Hay pop, jazz, bolero.
"Quería hacer lo que me saliera naturalmente: si era una bossa nova, que fuera; si duraba 6 minutos, pues bien; si tenia 20 acordes, son 20 acordes (...) más allá de cualquier convención impuesta por la industria", dijo la cantante.
Asegura que no tiene nada contra el reguetón, ha compuesto incluso en este género, pero sí está en contra de los artistas que lo usan solo como un vehículo para llegar a las radios.
"Uno tiene que ser auténtico", insistió. "Le tengo mucho respeto a los artistas que vinieron del reguetón, empezaron ahí y se dedican a eso, con los que dan un salto de 500 metros para estar al otro lado de la orilla, ahí ya me empieza a fallar el corazón", aseguró.
“Espectacular, sale solito”
El compositor muchas veces pasa por desapercibido, pero Brant no tiene problema de gritar "Ah, esa es mía", cuando escucha una de sus piezas, de las que siente gran orgullo. "Me pasa mucho".
Y el proceso de componer con otros varía: con algunos, una simple mirada es la chispa para una gran canción.
"Con Fonsi, en tres horas podemos hacer dos canciones, no necesita explicarme nada", resaltó. "Con Noel [Schajris] de Sin Bandera, lo mismo; con Beto Cuevas, con Marisol [Hernández] de La Santa Cecilia, es espectacular, sale solito".
De las 1.000 canciones que ha escrito, entre ellas la versión en español de "Havana", dijo que le cuesta escoger favoritas. Mencionó "Creo en mi" con Natalia Jiménez, "Sola" con Jessie Reyez y "Yo no merezco volver" con Morat.
"Pero mi favorita del mundo mundial es del disco 'Sincera' que se llama 'Ni blanco ni negro' (...) porque habla de la migración, que es un problema gravísimo por el que estamos pasando ahora", dijo.
Hasta la celebración del Grammy, el 10 de febrero en Los Ángeles, se dedicará a la promoción de su disco, aunque eso no implica que parará de componer. “El trabajo no para nunca”, dice.