Ante las afirmaciones falaces de algunos medios que quieren poner en tela de juicio la intención del Gobierno de cumplir y hacer cumplir las normas laborales, señalando que se querría eliminar el salario mínimo, la principal institución responsable del área salió a desmentir la versión engañosa, pues no existe tal decisión.
El Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (MTESS) señaló categóricamente que la aplicación del sueldo mínimo legal está en plena vigencia y que no existen intenciones de eliminarlo sino de cuidar su cumplimiento como corresponde.
Es más, ninguna secretaría estatal ni poder ejecutivo de turno podría dejar de lado su aplicación, porque existe una norma constitucional que la establece de manera categórica y específica. Las disposiciones de orden nacional e internacional vigentes no dejan ninguna duda en la materia: el salario mínimo se cumple, sin discusión alguna.
El artículo 92 de la Constitución Nacional sobre la retribución del trabajo dice que el trabajador tiene derecho a disfrutar de una remuneración que le asegure, a él y a su familia, una existencia libre y digna. Agrega: “La ley consagrará el salario vital mínimo y móvil, el aguinaldo anual, la bonificación familiar, el reconocimiento de un salario superior al básico por horas de trabajo insalubre o riesgoso, y las horas extraordinarias, nocturnas y en días feriados”.
Al ser una disposición de rango constitucional, ningún gobierno ni ministerio de ninguna laya puede eliminarla, sino que debe cumplirla estrictamente. Por consiguiente, solo una convención constituyente podría sacarla o modificarla, cosa que no está previsto realizar en la actualidad por las autoridades nacionales ni los partidos políticos con representación en los poderes del Estado.
En nuestro país el necesario cumplimiento de la vigencia del salario mínimo está respaldado por tres convenios suscritos entre el Gobierno nacional y la Organización Internacional del Trabajo (OIT): el Convenio n.° 26 sobre la fijación del salario mínimo, el n.° 95 sobre la protección del salario y el n.° 99 sobre fijación del salario mínimo en la agricultura. La OIT es una dependencia de las Naciones Unidas que se encarga de los asuntos y relaciones laborales, para promover el progreso social y económico mediante la cooperación de los gobiernos, trabajadores y empleadores.
La ministra de Trabajo, Mónica Recalde, aclaró que la modificación del modelo de fijación del salario mínimo nunca estuvo en la agenda de este gobierno. “El establecimiento del Estado o su rectoría con respecto a la regulación laboral y la fijación de los ingresos de los trabajadores es una materia constitucional. Por eso, podemos aclarar y asegurar que esto no está en agenda, ni se va a tratar, ni está en tela de juicio”, explicó la secretaria de Estado.
El comunicado que dio a conocer el Ministerio de Trabajo sobre el salario mínimo expresa, entre otras cosas, que “de ninguna manera existen intenciones por parte del Gobierno de eliminar este derecho fundamental”.
El texto del ministerio mencionado resalta que la finalidad del salario mínimo es proteger a los trabajadores contra el pago de remuneraciones indebidamente bajas.
“Este mecanismo asegura que todos puedan beneficiarse de una justa distribución de los frutos del progreso, garantizando un salario mínimo vital para quienes estén empleados y necesiten esta clase de protección. Además, los salarios mínimos son una herramienta clave en las políticas públicas destinadas a superar la pobreza y reducir la desigualdad, incluyendo las disparidades de ingresos entre hombres y mujeres”, resalta el documento oficial.
Teniendo en cuenta que el Gobierno ha descalificado la supuesta eliminación del salario mínimo legal y que está trabajando fuertemente para el cumplimiento de esa obligación de parte de las patronales, es necesario señalar que la ciudadanía debe tener conciencia de la necesidad de proteger ese derecho. Ninguna sociedad civilizada puede permitir la explotación del trabajador, como ocurría en épocas anteriores, en que se vulneraba descaradamente ese derecho humano fundamental.
Antes bien, tiene que ayudar a que sea respetado y promovido en su dignidad de ser humano, con el cumplimiento del salario mínimo legal y otras disposiciones relacionadas a la protección de las personas que trabajan. Una tarea de mucha importancia en un país donde un alto porcentaje de trabajadores todavía no reciben el tratamiento legal que establecen las normas y requieren la ayuda de los organismos estatales competentes para ser protegidos de manera adecuada.