El anuncio de control que dieron en estos días desde la Dirección Nacional de la Patrulla Caminera de vuelta generó todo tipo de sus­picacias en la ciudadanía y fuera manifes­tada de diversas formas a través de las redes sociales. Lastimosamente se ha perdido la noción de la importancia de los organismos fiscalizadores como de seguridad vial en las rutas a causa de la degradación de las ins­tituciones, es por ello que (aunque parezca obvio) vale insistir en que el desafío de estas intervenciones se centra exclusivamente en resguardar la movilidad de los conductores.

Por resolución número 15/2024, la Cami­nera avisó en la víspera que dispone el plan de seguridad vial por las fiestas de Navidad y Año Nuevo que se extiende hasta el pri­mer día de 2025.

Se prevé la presencia laboral de un total de 487 inspectores que estarán equipados con chalecos tácticos, radios, linternas, dispo­sitivos de multas electrónicas y todas las herramientas necesarias. También se ten­drá un total de 102 vehículos, entre camio­netas, automóviles, motocicletas, camiones plataforma y ómnibus, anunciaron desde la mencionada institución.

Sin dudas, la Caminera tendrá trabajo. Estas fechas son tradicionales en el despla­zamiento de la gente, pero principal y lasti­mosamente suelen resultar sensibles por la cantidad de accidentes ocasionados sobre el asfalto.

La Caminera es una institución muy importante dentro del Estado, pero todavía carga con el estigma de la recaudación y es una condición muy humillante que denigra la real necesidad de contar con su presen­cia en las rutas. Los operativos tienen que volver a ganarse la confianza de la gente, con trabajo eficiente, firmeza en el cumpli­miento de las normas de tránsito, conside­rando la cantidad de vidas que se ha arre­batado la imprudencia de los dueños del volante en los últimos tiempos.

En la medida que la dignidad de la institu­ción sobresalga, los infractores serán cons­cientes de que no tienen otro camino que respetar las normas de tránsito. Detrás de estas tareas del Estado hay una enorme lucha por la vida. Recordemos que son más de 900 las víctimas fatales en trágicos acci­dentes que enlutaron a muchas familias en nuestro país.

Los anuncios institucionales hablan de que en los procedimientos verificarán a los con­ductores en estado de alcoholización, tam­bién harán control de velocidades en zonas específicas y supervisión de adelantamien­tos indebidos.

Las unidades de tránsito de las diferen­tes municipalidades como el Ministerio Público apoyarán los operativos. De hecho, es fundamental que las comunas adop­ten iniciativas de prevención de accidentes de tránsito y realicen también operativos coordinados al interior de sus urbes como una manera de incentivar la presencia de organismos de fiscalización y que la ciuda­danía tome conciencia de que están sujetas al control.

La comunicación de los requerimientos de documentación como del sistema técnico de los vehículos que realiza la Patrulla para evitar eventos confusos es muy impor­tante. Es necesario que se insista con los avisos institucionales de manera a que los controles se lleven a cabo conforme a requi­sitos transparentes.

Un dato no menos importante es la digi­talización de los documentos de tránsito llámese registro de conducir, habilitación, etc. En el portal del Ministerio de Comu­nicación están disponibles los diferentes vínculos institucionales para tramitar la documentación digital, en este caso para los olvidadizos que tomen el volante cuya facilidad es muy pertinente socializar.

Ingresan días de alto desplazamiento por las fiestas de fin de año. La gente va a donde están los suyos, es tradicional la visita a familiares del interior del país y viceversa. En este contexto resulta trascendental la seguridad vial y la experiencia, la prepara­ción de la Patrulla Caminera puede marcar la diferencia con la seguridad en el tránsito mediante intervenciones de control serias, abocadas al cumplimiento de las normas.

Podemos evitar varias tragedias, res­guardar vidas e impedir el luto a muchas familias con unos agentes honestos y res­ponsables comprometidos en honrar a la institución mediante resultados más con­cretos para los ojos de la ciudadanía.