En el último día del 2023 corresponde señalar que uno de los logros más importantes del año calendario que culmina hoy es haberse puesto freno a la delincuencia con hechos y situaciones contundentes que trazan un nuevo camino para construir la seguridad de nuestro país. Al gobierno que asumió en agosto no le tembló la mano para golpear a los delincuentes en el comienzo de una enorme tarea que tiene por delante. El avance extraordinario de la delincuencia que había permitido la administración anterior con su pasividad se encontró con el accionar de la nueva que está demostrando con hechos indiscutibles el rumbo de la nueva política contra el delito.
El presidente de la República, Santiago Peña, fue muy claro al abordar ese tema resaltando que el Paraguay no puede estar sometido al capricho y gusto de los que están fuera de la ley y que quieren manejar el país como si fuera su propia casa teniendo el poder de hacer y deshacer lo que les importa. Afirmó que el Estado no puede rendirse a las bandas criminales, permitiendo que tengan el control de las cárceles, que manejen a ciertos funcionarios y al propio Estado. Dejó claro que esa situación lamentable debe ser erradicada si se quiere un país grande.
“El Estado no puede ser sometido por aquellos que decidieron caminar por fuera de la ley. Me rehúso a tener miedo de una persona que está privada de su libertad. No voy a vivir en un Paraguay donde quienes elegimos caminar al lado de la ley tenemos miedo a quienes deciden caminar por fuera de la ley. Yo no voy a vivir ese Paraguay. No es el país que heredamos nosotros. No podemos entregar nuestro país”, sentenció en el acto de condecoración de los agentes policiales que participaron del operativo Veneratio, que desarticuló la mafia de la Penitenciaría Nacional de Tacumbú.
“Asumí convencido de que el Paraguay tiene un destino de grandeza. La seguridad es un componente fundamental, una condición necesaria para que exista el desarrollo económico y social. El Estado no puede ser sometido por los que caminan fuera de la ley. Nuestra lucha está compuesta de grandes batallas, de pequeñas, de los actos de coraje”, expresó el mandatario nacional en esa ocasión, destacando los últimos procedimientos en el combate contra las organizaciones criminales.
Comentando la importancia de la seguridad ciudadana, en la ceremonia en que entregó a la Policía las armas capturadas en el operativo Dakovo, realizó definiciones que no dejan lugar a duda. “Asumí convencido de que el Paraguay tiene un destino de grandeza. La seguridad es un componente fundamental, una condición necesaria para que exista el desarrollo económico y social. El Estado no puede ser sometido por los que caminan fuera de la ley. Nuestra lucha está compuesta de grandes batallas, de pequeñas, de los actos de coraje”, manifestó.
El combate contra las organizaciones criminales ha adquirido con el gobierno actual una extraordinaria importancia, que se está observando en los excelentes resultados que se han conseguido en las últimas semanas. Lo que muchos pensaban que ya estaba perdido en manos de los criminales se está logrando recuperar mediante el trabajo de las fuerzas que responden al Estado en diversos frentes de lucha.
Con el operativo Veneratio se logró volver a controlar la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, que, en gran medida, estaba manejada por los exponentes del crimen organizado. Lo lamentable y ridículo para el Estado paraguayo era que la cárcel más importante de la nación estaba bajo control de un grupo mafioso sin poder hacer nada. Situación que se ha superado, y desde el 18 de diciembre la mencionada institución está otra vez bajo control del Estado.
Con otras acciones militares contra la mafia se logró desarticular parte de los grupos criminales que dominaban la zona fronteriza con Brasil. Y con el operativo Dakovo se pudo desmontar el sistema de tráfico de armas de guerra que alimentaba desde nuestro país a la delincuencia internacional.
Considerando estos hechos se puede afirmar que la actual administración estatal ha conseguido logros fundamentales en materia de seguridad. Que son el comienzo de una larga tarea para alcanzar la victoria final.