Una de las primeras actividades que desarrollaron las nuevas autoridades nacionales luego de su asunción oficial fue tomar contacto con las fuerzas empresariales de los más diversos sectores del país. Fue para mostrarles la radiografía del país, la histo­ria reciente de sus logros, los detalles de su macroeconomía, con los objetivos obteni­dos en los últimos 20 años, que garantizan su estabilidad. También les mostraron las ventajosas oportunidades que ofrece a los que desean realizar inversiones.

El Paraguay debe volver a crecer en su eco­nomía y su desarrollo social en grandes pro­porciones para volver a ser el gigante que dejó de ser. Es la idea que propone como motor de su gestión el presidente Santiago Peña para convertir a nuestro país en el coloso de las inversiones, con una inmensa producción y una sensible alza en el nivel de vida de la gente. De ahí su lema de “Para­guay: el resurgir de un gigante” con el que encara su gestión gubernativa.

Ante la gran cantidad de empresarios y agentes de la economía reunidos en el salón de convenciones del Banco Central del Para­guay (BCP), el mandatario destacó que en estos momentos nuestro país está ante una ocasión especial para volver a crecer fuerte­mente y los invitó a participar de esa tarea.

“Estamos ante una oportunidad única. Me toca mirar con un tremendo optimismo. Paraguay viene transitando este proceso de recuperación y estamos en puertas de dar uno de los mayores saltos”, comentó en su primera jornada de gobierno. “Esta opor­tunidad está construida sobre cimientos, sobre bases que hemos construido los para­guayos. La estabilidad que hemos conso­lidado es la victoria de la sociedad”, men­cionó, recordando que se ha progresado mucho en los últimos años y que lo que él desea es acelerar ese proceso de evolución.

El primer mandatario y su ministro de Hacienda, Carlos Fernández Valdovinos, explicaron su plan de trabajo para demos­trar la conveniencia de invertir en el Para­guay para producir más y hacer crecer el patrimonio empresarial mediante las uti­lidades financieras que provendrán de sus inversiones.

El ministro Fernández Valdovinos aseguró que no habrá suba de tributos. “¿Para qué se subirán impuestos si gastaremos de la misma manera? El Paraguay no va a subir los impuestos de acá para adelante. Ese es otro de los compromisos que tenemos. El país necesita hacer una gran reingeniería del gasto público”, remarcó.

Este contacto con las fuerzas de la produc­ción es clave, pues, como señalaron los dos oradores, el gobierno nacional pondrá las condiciones económicas y legales, pero los que van a destinar su capital para realizar las inversiones son las fuerzas del sector privado que están deseosas de aprovechar las nuevas oportunidades que se presentan. Son los que con la compra de activos harán crecer sus utilidades económicas mediante la explotación de diferentes renglones de la actividad económica. Y con su gestión crea­rán los nuevos puestos de trabajo que nece­sita la población nacional.

El titular de Hacienda explicó que los inversionistas pueden mantenerse tran­quilos con la política económica del nuevo gobierno. Señaló que el dinero que invier­tan en Paraguay, “no solamente redituará en términos nominales porque tendrá un retorno elevado, sino que gracias al trabajo del Banco Central va a mantener su valor real, está el compromiso y la historia del Paraguay para atestiguar eso”.

El mayor entusiasmo empresarial por invertir hará posible y hasta más fácil alcan­zar las altas metas fijadas para mejorar cuantitativamente el desarrollo. El sector privado cuenta con numerosos elementos económicos, legales, financieros, sociales y políticos para evaluar con tranquilidad la conveniencia de realizar inversiones en nuestro país, por las grandes ventajas que se ofrecen en los más diversos renglones.

A medida que los hombres de negocio conozcan las cifras de los más diversos indi­cadores económicos podrán tener la cer­teza de que como Paraguay hay muy pocas naciones en esta zona del mundo que tie­nen las ventajas que se requieren. Ofrece los menores niveles de impuestos, la mayor abundancia de energía eléctrica limpia, una gran porción de tierras inexplotadas, una estabilidad política y económica que tienen muy pocos. Con la asunción de este nuevo gobierno, que tiene previstas más venta­jas en su gestión, se presentan aún mejores oportunidades que se pueden aprovechar para la concreción de más inversiones.