La proximidad de los comicios de abril venidero en que se ele­girán a las nuevas autoridades que conducirán al Paraguay no permite a los candidatos de las distintas agrupaciones políticas perder tiempo. Los plazos se cumplen con mucha rapi­dez y se requiere trabajar en todos los frentes posibles, tanto aquí como en el exterior. Porque estar al frente de la con­ducción de un país no es solo para lo que ocurra dentro sus fronteras geográficas, si no, además, para lo que suceda en las diferentes naciones del mundo, en espe­cial en aquellas de mayor importancia económica y política del concierto inter­nacional.

Por eso el candidato presidencial colorado Santiago Peña está visitando Washing­ton DC, la capital de los Estados Unidos, respondiendo a invitaciones recibidas de organizaciones del gran país del norte. En la prestigiosa Universidad George Washin­gton dictará una charla sobre la realidad paraguaya, invitado por las autoridades de la institución académica. Y aprovechará su estadía en ese país para reunirse con las colonias de paraguayos que se encuentran residiendo allí.

El presidenciable republicano está atento a todo lo que concierne a la vida del Para­guay. Por eso, apenas concluyan las elec­ciones generales del 30 de abril comenzará a trabajar en temas específicos, sobre todo en la preparación del proyecto de Presu­puesto General de la Nación, a partir de mayo. Aunque la asunción política oficial se dará el 15 de agosto, las tareas para prepa­rar la ley presupuestaria comienzan mucho antes para trazar las grandes líneas de la actividad económica de la nación. Habi­tualmente, los estudios del anteproyecto de Presupuesto General de la Nación ya comienzan en mayo, en los distintos orga­nismos públicos, que tienen que presentar sus propuestas al Ministerio de Hacienda a más tardar el 30 de junio de cada año para ser incluidas en el proyecto general.

Hablando de su propuesta, Santiago Peña ha señalado insistentemente que la prin­cipal tarea es trabajar por la gente. “En mi proyecto de gobierno, me puse como meta generar 500.000 puestos de empleo, y estoy muy entusiasmado con la respuesta que podemos dar, sin el riesgo de caer en el populismo u ofrecer propuestas sin con­tenido”, afirmó recientemente en el pro­grama “Fuego Cruzado”, emitido por canal GEN. Recordó que mucha gente cree que los primeros cien días de un gobierno se inician recién desde agosto. Pero aclaró que arrancan de verdad desde el 2 de mayo, a pocos días de las elecciones. Por consi­guiente, dijo que se compromete a insta­lar desde esa fecha un equipo de transición para ir delineando aspectos importantes como el Presupuesto General de la Nación, enfatizando en la inversión en salud, segu­ridad y educación para el año entrante. Como ex ministro de Hacienda, conoce perfectamente los tiempos en que se deben preparar los números para la buena mar­cha de una administración estatal.

Otro de los puntos importantes de su pro­yecto de gobierno es acelerar el proceso del crecimiento económico del país, además de mejorar la política monetaria, dinami­zando el crédito y haciendo más efectivos otros sectores clave de la realidad nacional.

Con respecto a las relaciones con el mayor socio comercial, el Brasil, Peña consideró que se diseñará con el presidente Lula da Silva una agenda provechosa para los inte­reses nacionales, que debe basarse en el mutuo crecimiento y las ventajas recípro­cas mediante una diplomacia seria y patrió­tica. Aparte de Itaipú, un asunto de gran relevancia entre ambos países, existen muchas cuestiones económicas que guar­dan relación con las actividades industria­les y comerciales.

Explicó que el debate sobre el futuro del Mercosur es de gran importancia para nuestros países. Y añadió que debe enca­rarse con solvencia, pues una diplomacia dubitativa no le sirve al Paraguay. “Tene­mos que consolidar una diplomacia que produzca logros, que haga goles, que nos produzca beneficios”, enfatizó, resal­tado que el Brasil es fundamental como aliado del Paraguay e imprescindible en la geopolítica del hemisferio en que nos encontramos.

Este nuevo año es de gran importancia política para nuestro país, porque se cam­bia el gobierno nacional. Con la nueva con­ducción también habrá oportunidades para mejorar la situación económica y social de los paraguayos. A condición de trabajar fuertemente para edificar un futuro digno para todos los que habitamos el país.