El martes a la noche, víspera de la festividad de los Reyes Magos, llegó a Paraguay desde Miami una aeronave de la norteamericana Eastern Airlines. Esta aerolínea retorna luego de casi cinco años. De ese modo, se reabre el contacto directo entre una de las naciones más importantes del mundo y nuestro país. El hecho es una etapa de alta significación, pues luego del reinicio de los vuelos con Europa, con varios países de la región y la reapertura de las fronteras terrestres con Brasil, el Paraguay está retornando a la casi normalidad de contactos internacionales tanto para pasajeros como para mercaderías. Solo falta ahora reabrir la frontera de las ciudades limítrofes con la Argentina, país con el que se tienen habitualmente vuelos aéreos diarios entre Asunción y Buenos Aires, desde hace un tiempo.
El restablecimiento de los vuelos comerciales entre Asunción y Miami no es una mera anécdota noticiosa, pues en esta ocasión reúne varios hechos coincidentes, todos muy positivos, que forman un concierto de relevancia para el futuro. Cuando muchos países están atornillando sus puertas contra el flujo de personas para cuidarse de la pandemia, aquí se abren nuevos vientos de esperanza para apostar por el intercambio de personas y el tráfico comercial, como en los tiempos normales. Una apuesta muy valiente para construir un porvenir con más posibilidades de intercambio mirando la mutua conveniencia de nuestros países. Es que existe la convicción de que, más allá de las contingencias de la vida y los avatares del día a día de las naciones, hay que seguir construyendo de cara al futuro.
El responsable de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (Dinac), Félix Kanazawa, ilustró sobre la importancia del hecho señalando que mediante la conexión con Miami se abre la posibilidad de acceder a más de 300 vuelos a distintos puntos de ese país y del mundo desde ese aeropuerto. En tanto que la ministra de Turismo, Sofía Montiel, puntualizó que la tarea del sector empresarial privado será fundamental para darle más fuerza a la conectividad internacional.
Por su lado, el encargado de negocios de la embajada norteamericana en nuestro país, Joseph Salazar, no ahorró elogios. Puntualizó que el acontecimiento era un hito histórico en el relacionamiento bilateral entre el Paraguay y los Estados Unidos debido a su trascendencia.
Uno de los técnicos de la Dinac, Douglas Cubilla, corroboró las aseveraciones del representante diplomático y los funcionarios paraguayos. Señaló que con esta nueva ruta se va a reanimar un importante flujo comercial entre ambos países, que ayudará a la llegada de inversionistas. Dijo que el avión Boeing 767 de Eastern tiene una capacidad de bodega importante, lo que ayudará a facilitar el transporte de mercaderías entre ambos destinos.
Señaló el funcionario como llamativa la actitud de la firma aérea estadounidense que está promocionando los viajes a Paraguay con un cartel apostado en una de las principales avenidas de Miami que conduce al aeropuerto.
Un detalle importante de la reapertura de vuelos directos con los Estados Unidos es que la conexión responde a una evaluación favorable de las medidas de seguridad aeroportuaria del Silvio Pettirossi, que en noviembre último realizó el Departamento de Seguridad Nacional para la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA, en inglés) de EEUU. Especialistas de la TSA visitaron el país entre el 17 y 19 de noviembre del 2020 para inspeccionar el aeropuerto y encontraron que las medidas de seguridad de aviación del Silvio Pettirossi eran adecuadas para realizar los vuelos. Fuentes de Dinac señalaron que Paraguay es el primer país del mundo seleccionado por la TSA luego de la aparición de la pandemia.
La reapertura de viajes aéreos con el país del norte tiene la importancia de restablecer no solo los lazos comerciales que estaban casi nulos a causa del aislamiento ocasionado por la pandemia, sino que abre la posibilidad de darle nuevos bríos al turismo. Con Miami, la activa ciudad comercial del Caribe de los Estados Unidos, los intercambios económicos han sido siempre muy intensos desde hace décadas.
El contacto restablecido es altamente efectivo para los intereses del Paraguay y hay que celebrarlo como lo que es, una etapa nueva para el mejor relacionamiento con el país líder de Occidente.