Mediante una burda manipulación del Presupuesto General de la Nación (PGN) para el 2021, el Senado obvió la política de austeridad que el Gobierno pregona a los cuatro vientos ante la difícil situación económica por la pandemia de covid-19.
Por Jhojhanni Vega
Periodista de Investigación GN
La Cámara de Senadores decidió aumentar los montos destinados para el pago de sueldos, aguinaldos y gastos de representación previstos dentro del Presupuesto General de la Nación (PGN) del próximo año. A pesar de la actual pandemia por covid-19 que dejó múltiples problemas económicos y por la cual se implementó una política de austeridad dentro del sector público, los legisladores han manipulado a su antojo una vez más el dinero del pueblo.
Es así que en total ha sufrido un aumento del 9% el presupuesto para “servicios personales” del Congreso Nacional dentro de la versión del PGN 2021 de la Cámara Alta, ya que hay que destacar que este incremento no fue incorporado en la versión del PGN de Diputados, que mantuvo intacto el plan de gastos del Ejecutivo. De hecho, cabe destacar que la versión original del PGN aprobada por la Cámara Baja y el Ejecutivo contemplaba una disminución del gasto en este aspecto con relación al PGN 2020.
Sin embargo, en la última versión del presupuesto elaborada por el Senado se decidió elevar los montos previstos para el pago a funcionarios públicos. De esta forma se aumentó de G. 73.103 millones para Servicios personales en a la versión original a G. 79.972 millones en la versión del Senado, una diferencia de G. 6.869 millones (9%) entre uno y otro.
Como se mencionó anteriormente dentro de este aumento se contemplan los gastos de sueldos, de G. 41.401 millones contemplados originalmente por el Ejecutivo y aprobado también por Diputados se pasó a G. 47.475 millones en la versión de los Senadores. Asimismo, el presupuesto para el pago de aguinaldo pasó de G. 4.201 millones a G. 4.729 millones; y el pago por gastos de representación incrementó de G. 2.623 millones a G. 2.878 millones.
Igualmente fue aumentado el presupuesto para los honorarios profesionales dentro del Congreso Nacional, que pasó de G. 3.342 millones en la versión de Diputados a G. 3.566 millones en la adaptación final del Senado. Como se mencionó anteriormente, estos aumentos contradicen la política de austeridad que viene manejando el discurso del Gobierno Nacional durante la pandemia de covid-19 que golpeó fuertemente al país en materia económica.
También esta manipulación del presupuesto viene acompañada de otros descontrolados gastos fuertemente cuestionados que ha hecho el Legislativo recientemente, como el caso del crédito de US$ 25 millones que fue aprobado por los senadores y que serán distribuidos por las organizaciones campesinas, no así a través del Ministerio de Agricultura y Ganadería como contemplaba la versión del proyecto de la Cámara de Diputados.
“La responsabilidad la tiene tanto el presidente de Diputados como el presidente del Senado, son ellos quienes tendrían que justificar la necesidad (del aumento) porque también hay una visión de los administradores de turno de qué es lo se va a hacer con los recursos”, expresó el senador Mario Martín Arévalo (ANR) miembro de la Comisión de Hacienda y Presupuesto de la Cámara Alta. Recordó que durante la administración de Blas Llano al frente del Senado se recortaron todos los gastos superfluos en consonancia con la Ley de Emergencia Nacional y que el Ministerio de Hacienda debe intervenir de ser necesario.
Por otro lado, este medio intentó comunicarse con el presidente del Congreso Nacional Óscar “Cachito” Salomón para conocer los criterios del generoso incremento pero este dijo que estaba en una reunión con miembros de la Agencia Financiera de Desarrollo (AFD) y que devolvería la llamada prontamente. No obstante, el mismo ya no respondió a nuestras llamadas o mensajes.
MÁS FUNCIONARIOS SIN LÍMITES
Además de los aumentos del presupuesto, en el Senado también realizaron cambios dentro del ámbito normativo del PGN 2021. En la versión de la Cámara de Senadores se modificó el artículo 57 de la legislación para permitir la contratación de nuevo personal sin autorización del Equipo Económico Nacional (EEN).
“El Poder Legislativo y el Poder Judicial contratarán de acuerdo con su disponibilidad presupuestaria, y conforme a sus requerimientos sin necesidad de autorización del Equipo Económico Nacional (EEN) y de la Secretaría de la Función Pública”, sostiene la versión del Congreso. También, se cambió el artículo 58 donde se estableció que el Poder Legislativo podrá realizar promociones de cargos, con excepción de lo establecido en la Ley N° 1626/2000 “De la función pública”, por ende, el Congreso podrá realizar promociones sin necesidad de respetar la ley impuesta para los demás entes públicos.