Grandioso. Extraordinario. Los adjetivos se agotan cuando se trata de describir el recibimiento que le hizo la hinchada franjeada al equipo de Daniel Garnero, que enfrenta a Libertad este miércoles en busca de su título N° 41.

El grandioso mosaico preparado por los hinchas en el Defensores fue magnífico, ya que rindió homenaje a uno de los ídolos de su actual plantilla, y de todos los tiempos, Roque Luis Santa Cruz, que volvió a la institución de Para Uno para retirarse de su larga y prolífica trayectoria como futbolista.

Además, el mosaico incluye frases de uno de los cánticos más emblemáticos que entona cada juego el hincha olimpista: “Una tarde, mi viejo me llevó…”. También los demás sectores del Defensores del Chaco se unieron al maravilloso recibimiento con banderas, cánticos y fuegos artificiales.

El mosaico, una bienvenida que se estila también en los grandes escenarios europeos, comenzó a emplearse en el 2013, cuando Olimpia había enfrentado por Copa Libertadores al Tigre argentino.

Ese año, el Franjeado fue finalista de la Copa Libertadores, pero durante toda la campaña copera, los hinchas recibieron con diferentes mosaicos al primer equipo, entonces dirigido por otro ídolo franjeado, Ever Hugo Almeida.

También en el 2015, la hinchada decana lo utilizó en Copa Sudamericana.