- Por César Palacios
- Comunicador y docente, @cespala
El vicepresidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), juez Rodrigo Mudrovitsch, que concluyó su visita al Paraguay el pasado fin de semana, dijo antes de partir de Costa Rica, que en la visita realizada en las comunidades indígenas del Chaco se han podido constatar avances importantes en el cumplimiento de las sentencias a favor de las mismas.
Mudrovitsch, con amplia formación en Derechos Humanos, abogado y profesor universitario, se refirió a los tres días de visitas y audiencias con integrantes de las comunidades Sawhoyamaxa, Yakye Axa y Xámok Kásek, a fin de constatar el cumplimiento de las sentencias de la CIDH en favor de las mismas. Habló de un “balance muy positivo” en las tres comunidades visitadas. Tuvimos la oportunidad de acompañar esta misión de trabajo y constatar los avances.
“Fueron días muy intensos, con muchas actividades, pero salimos con avances que ya fueron mencionados en las visitas en las comunidades, comenzando por la cuestión del camino para la comunidad Yakye Axa, la instalación de los puestos de salud que están pendientes pero que nos parece que están muy cercanas de ser concluidas en las comunidades de Xamox Kásek y Sawhoyamaxa”, dijo.
El juez Mudrovitsch mencionó que desde la anterior visita de una delegación de CIDH a estas comunidades indígenas, han pasado siete años y que en este tiempo “mucho se cambió y eso es muy importante”. “El cambio es visible y eso lo hemos hablado abiertamente con las comunidades. Es visible que se ha tenido avances”, remarcó.
Mudrovitsch agradeció al Estado paraguayo “por todo lo que han hecho para permitir que esta visita pueda ser realizada”. Aclaró que la evaluación sobre la situación de cumplimiento de la sentencia será hecha por el pleno de la Corte en base a las informaciones recabadas en la visita.
El vicepresidente de la Corte Interamericana manifestó que todo evidencia, el gran compromiso del Gobierno de Paraguay de cumplir estas tareas en materia de Derechos Humanos, donde el Paraguay fue condenado por gobiernos poco o nada comprometidos con esta materia.