EL PODER DE LA CONCIENCIA
- Por Alex Noguera
- Periodista
- alex.noguera@nacionmedia.com
Las personas prefieren evitar ciertos temas, como si fueran una enfermedad contagiosa. Por eso, es natural que en esta semana del riñón pasen desapercibidas las cada vez mayores cifras del Ministerio de Salud que indican que en Paraguay unos 2.300 pacientes se someten actualmente a hemodiálisis.
Más interesante es hablar sobre la imputación del expresidente Abdo y sus acólitos e imaginar su cara de miedo cuando traten su desafuero o comentar cómo los corruptos reciben “apoyo” de sectores “democráticos”, que por puro interés opinan que Marito es casi un santo.
También esta semana estuvieron divertidos los memes que demostraban lo fácil que resulta crear falsos mensajes por WhatsApp y los audios filtrados de conversaciones secretas.
Hace dos días, el jueves para ser más exacto, acudí a uno de los centros donde los pacientes se someten a la hemodiálisis para seguir viviendo y tienen que permanecer “atados” a una máquina durante cuatro horas, tres veces por semana. Por el Día del Riñón, los organizadores colocaron coloridos y alegres globos y hasta hubo una mesa con refrigerios: botellitas de agua, manzanas y yogures. Todo muy sano y con poco potasio.
Para variar, en la reunión los temas eran… ¡riñón y Marito! Fue entonces cuando fui testigo de este audio secreto y escuché la charla entre dos pacientes. Uno comentaba que no sabía qué hacer, en IPS le dijeron que debían hacerle un estudio del corazón, pero que los contratos estaban caídos desde el año pasado. Entonces llamó a varias clínicas privadas y laboratorios y le pasaron un presupuesto de G. 5.514.000.
“–¿De dónde voy a sacar esa plata?”, preguntaba. “–Si no me hacen ese estudio no me pueden operar para una nueva fístula, ni sacar la piedra de la vesícula ni entrar en la lista de espera de posibles donantes. Hace un año que vengo peleando para entrar en esa lista y ahora me encuentro con que no se hace ese estudio. Antes se hacía”, agregó resignado.
“–Ya ves”, contestó el otro protagonista, “–Mario Abdo y sus secuaces robaron todo lo que había y hasta ahora, indirectamente, lo siguen haciendo, y la gente muere porque IPS, así como dice Javier Milei, no tiene plata. Es lo que dicen. Fijate el platal que este gobierno tuvo que pagar de deudas que dejó el desastre ese”.
“–No es ningún desastre katu, escuché la entrevista que le hicieron por tele y cuando le preguntaron antes de las elecciones si creía que le iban a perseguir luego de dejar la Presidencia, contestó: ‘Estoy preparado. Mi familia está preparada’. Eso quiere decir que ya escondió toda la plata. Nunca van a pillar dónde guardó todo lo que saqueó. ¿Dónde está su hermanastro?”
“–Sí, ahora se hace del inocente, pero le fundió a mucha gente. Muchos empleados perdieron su trabajo con la propaganda descarada de sus medios aliados. Son sicarios de la información que se las dan de moralistas”.
“–¿Le viste a Mabel? Por poco no zapateaba todo. Parecía que le atacaban a su propio hijo. En lugar de ahondar en los ilícitos cometidos trataba de distraer el tema”.
“–Muchos dan asco, de verdad. De qué te extrañás, si durante cinco años no hicieron ni una sola investigación, siempre miraron hacia otro lado. Para ellos no había ni corrupción, ni negociados, ni contrabando, todo era perfecto protegiéndole al jefe desastre y cobrando publicidad del Estado”.
“–Menos mal que les salió mal su persecución. La gente se dio cuenta y en las elecciones perdió como en la guerra”.
“–Por suerte perdieron, pero por el camino pisaron a demasiada gente. Causaron mucho dolor por dinero. Esperemos que se haga justicia y los envíen presos”.
“–Así debe ser. No es posible que un tipo sin escrúpulos cause tanto daño y se burle de todos”.
“–Ojalá. Por el momento, me preocupa de dónde voy a sacar los G. 5.514.000″.